Felipe SÁNCHEZ JIMÉNEZ
REVANCHISMOS
Dos momentos del desastre del 2006 que tanto padeció Oaxaca.
1.- Carlos Abascal, Secretario de Gobernación del mandilón Fox, apantallaba (en TV nacional) a los oaxaqueños con sus apapachos al incendiario “demonio de Tasmania” con el efusivo saludo de “don Flavio…”.
2.- Mensajeros del carnicero del momento se reunían en esos días con los operadores más temerarios de aquel conflicto político, para dotarlos de recursos y consignas contra las reses de aquella fecha. Padecíamos el clásico ajuste de cuentas entre políticos. Oaxaca estaba entre las patas de los caballos.
Hoy es lo mismo pero al revés. Estamos rememorando aquel viejo refrán, tan común entre la clase política: “las reses de ayer son los carniceros de hoy”, es decir, seguimos en el renglón del revanchismo político.
Hoy acusan que en busca de impunidad, Gabino Cue y Jorge Castillo, están en el papel de carniceros. Puede ser pero hay otro ingrediente que potencian los conflictos políticos tan machacones como los que padece Oaxaca en estos días: la ausencia de justicia. Me aterró la cifra de ¡sesenta carpetas de investigación por delitos contra periodistas, archivadas! La mayoría de ellas las enviaron al museo de la ignominia durante el “gabinato”.
Quien nos compartió la información la tarde el pasado lunes, fue el doctor Rubén Vasconcelos Méndez, Fiscal General del Estado. El joven jurista estuvo en la Casa del Periodista donde charló con un grupo de comunicadores miembros de la Asociación de Periodistas de Oaxaca (APO).
Con un claro concepto de lo que será la Unidad Especializada para casos de agresiones contra la libertad de expresión, Vasconcelos expuso ante los reporteros que, a la par con que se instalan oficinas y se recluta personal idóneo, están concentrando los expedientes de periodistas agredidos que esperan justicia. Esta decisión permite ver dos cosas.
Primero, la voluntad política del nuevo Fiscal por acotar la impunidad en el caso de agresión contra comunicadores. Agranda la cobertura al definir que será una unidad para castigar los delitos no solo contra periodistas sino contra todos los que se involucran en la libertad de expresión.
Segundo, es una muestra contundente de la impunidad que, no solo han tolerado, sino hasta han fomentado los sucesivos gobiernos contra comunicadores que consideran incómodos.
LO MISMO
Por el inmenso saqueo del presupuesto destinado para atender la salud de los oaxaqueños más pobres, están muriendo en hospitales públicos sin medicina, sin médicos, sin enfermeras, sin atención. Lo único que tienen esos nosocomios es una obesa burocracia. Urge personal médico en lugares donde los incompetentes oficinistas se estorban unos a otros.
La desgracia es que en el sector salud los nuevos funcionarios parecen estar en la misma inercia de la depredación. En el sexenio de Gabino Cue y su banda canallesca, Germán Tenorio tejió una red de complicidades al interior de la SSO, tan sofisticada que hasta la fecha sigue maniobrando. Sabemos de la rectitud del nuevo titular Celestino Alonso pero todo indica que los mafiosos siguen allí.
No sorprende el desabasto de medicamentos ni la inflada nómina de burócratas recomendada por el sindicato del “gato” Félix. Lo que asombra es que haya en la SSO funcionarios que siguen en la inercia del saqueo.
Unos sindicalistas me hicieron llegar copia de facturas como sospecha de que los Álvarez Candiani siguen siendo proveedores consentidos de la Secretaría de Salud no obstante las investigaciones en su contra y los antecedentes que dejaron cuando manejaron y fueron proveedores únicos del Seguro Popular, junto con Salvador Monroy.
Las sospechas, me dicen, giran en torno a Juan José Álvarez Candiani y Jorge Castillo así como algunos de su parentela que delinquieron vendiendo a la SSO, a precio alzado, medicamentos similares y de dudosa calidad.
Me comentan que las empresas proveedoras Phoenix Farmacéutica y que luego cambio de razón social a Farmacéutica Fénix, y Grupo Medico Pacífico Sur, aunque son negocios de los anteriormente mencionados, siguen concretando ventas con los Servicios de Salud de Oaxaca. Solo en dos facturas le vendieron el mes pasado 36 millones de pesos. Eso dicen y me anexan copias.
Uno de los empleados sindicalizados que conoce el modus operandi de los nuevos responsables del Seguro Popular en Oaxaca, me dice que ya les ha dicho que despiertan sospechas porque esos proveedores “son la misma gata pero revolcada”. Aun así se han negado a corroborar que sean negocios de los Álvarez.
RÉMORA
Los analistas del proceso de descomposición que ha llevado al llamado movimiento “democrático” magisterial, a la fase de cáncer en grado terminal, encuentran que su guía AMLO, resbaló en Oaxaca con una gran pifia.
Permitir que su activista estrella, Flavio Sosa, provocara incendios para aterrorizar a militantes de la “14 de junio” en los alrededores del gran muladar, se le revertirá al partido MORENA. La escuela de terrorismo del “demonio de Tasmania” necesariamente ahuyentará la clientela política del tabasqueño en permanente campaña presidencial, desde hace 3 sexenios. Incendiar casas y vehículos entre inmensas piras, es terrorismo extremo. Ni en el 2006 se atrevió a tanto.
ÚSESE Y DESÉCHESE
Salieron más socarrones los priistas desde el momento en que le dijeron a “Pancho mugres”: si te vi ni me acuerdo. En esas clásicas jugadas de los que ejercen el poder, a “Pancho mugres” y a su hijo Javier, los convirtieron en objeto de utilería: úsese y deséchese. El chilango Benjamín Robles, los creó para utilizarlos. Durante el “gabinato” la “14 de junio” funcionó como músculo golpeador. Les dieron impunidad para realizar todo trabajo sucio. Al concluir el sexenio fatídico, el PRI, a través del cándido Germán Espinoza, los atrajo a sus filas. Igual los ocuparon en la campaña electoral y al ganar les refrendaron esa especie de Patente de Corzo.
JUCHITÁN, SIN REMEDIO
Seguramente, cuando el juchiteco, Héctor Sánchez López, alias “Mexha”, en los años 90, creó y encabezó, con un grupo de osados jóvenes, la coalición de fuerzas “izquierdistas” conocida como COCEI, pensó que iba a hacer la revolución. En efecto, hizo la revolución pero en la definición que hace el periodista Francois Revel: “las revoluciones sólo sirven para dos cosas: para concentrar aún más el poder o para nada”. En Juchitán, si a eso se le puede llamar revolución”, sirvió para que los Sánchez, hasta la fecha sigan en el pandero del poder en ese municipio sumido en los peores índices de inseguridad, corrupción oficial, abusos y violencia.
Desde figuras como nuestro ilustre Toledo, el obispo Lona y tantos personajes más que apoyaron el surgimiento de la COCEI (coalición obrero campesinos estudiantil del Istmo), han declarado públicamente su decepción por la conducta de los lideres -históricos y emergentes- de esa organización dada la gran corrupción que prohíjan. Los vicios de la COCEI llegaron a lo grotesco cuando la “Mexha” montó gran show en protesta porque a su pareja del momento, la habían excluido de la delegación juchiteca como cantante en el primer Lunes del Cerro.
Desde finales de los años 80, Héctor Sánchez, sus compañeros de aventura como Leopoldo de Gyves y toda su parentela -parejas, hermanas como Gloria que es actual edil, hijos- han usufructuado el poder que obtienen del chantaje y la presión política. Su multimillonario negocio en este momento, son los parques eólicos.
DEDAZO
(Sergio Sarmiento lo dijo con sorna pero con precisión: El PRI escogerá a sus candidatos por dedazo, el PAN por decisión cupular, Morena por “consenso” ¿Y cómo se definirá ese consenso? Será, supongo, lo que diga mi dedito).
Quién iba a decir que hoy, cuando México se alinea a los países democráticos, un partido como MORENA, vuelva al autoritarismo del “dedazo”. Ahora le llaman “consenso”. Así decidió el tabasqueño AMLO a sus candidatos en el reciente Consejo Nacional del partido Morena.
Pero no solo revive el “dedazo” del PRI. El cinismo de AMLO luce inconmensurable. De cara al 2018 ha decidido purificar bajo su manto protector a todo aquél tunante avezado en labores de mapachismo, recolección de “aportaciones” económicas, desviadores de recursos gubernamentales, etc. Lo que le importa al tabasqueño en este momento es que usen sus mañas para doblegar a la democracia y hacer ganar al eterno aspirante de “las izquierdas”.
Hay que recordar que en la Alameda arropó a lo más nefasto de la fauna nociva de la política chapulinera, como los Jara, los demonios de Tasmania, los chapos, entre otros detestables políticos. Con tal de que brinquen al MORENA, los limpió.
La moneda de cambio por la aportación de tan “funesta sapiencia” serán las candidaturas, pasando incluso por encima de la opinión y voluntad de los auténticos morenistas.