Daniela CHAO
La preocupación por la propagación del nuevo coronavirus que empezó hace tres semanas en un mercado en la ciudad de Wuhan, China, y que ha dejado un saldo de más de 500 personas infectadas y 25 muertos, además del primer caso detectado en Estados Unidos, llevó a la Organización Mundial de la Salud a convocar un comité de emergencia para tratar la epidemia en Ginebra, donde se decidirá si se clasifica el brote como una emergencia de salud pública de alcance internacional. Una designación que se emplea únicamente cuando se trata de epidemias muy graves.
Un hombre de unos 30 años fue hospitalizado en Everett, cerca de Seattle, tras haber contraído el nuevo coronavirus chino, anunciaron autoridades sanitarias de Estados Unidos, confirmando el primer caso en el país.
El virus se había manifestado antes en China, Japón, Corea del Sur, Tailandia y Taiwán.
El enfermo, cuya identidad no ha sido revelada, no visitó ninguno de los mercados de Wuhan, en China, de los que surgieron numerosos casos de afectados por el virus, pero sí viajó a esa región.
El hombre aterrizó en el aeropuerto de Seattle el 15 de enero tras un vuelo indirecto desde Wuhan. No tenía síntomas a su llegada, pero contactó con los servicios sanitarios el domingo tras la aparición de los primeros síntomas.
Una muestra transmitida a los CDC permitió confirmar que había contraído el nuevo virus.
Se teme que el virus se propague rápidamente durante las vacaciones, por las que se prevén millones de desplazamientos.
Varios países asiáticos y Estados Unidos pusieron en marcha controles de detección para los pasajeros procedentes de Wuhan, la ciudad china en la que se identificó el epicentro del virus.
La Secretaría de Salud de México informó que en todas las terminales internacionales se controlan los vuelos provenientes de China.
