Agencias.-El mundo de nuevo se está poniendo nervioso por la salud de los grandes bancos, especialmente por la de aquellos con sede en Europa. Las acciones bancarias no solo se han desplomado a un ritmo alarmante, sino que los inversionistas están aumentando sus apuestas a que algunos de ellos podrían incumplir con el pago de sus deudas si la economía mundial …