Un maestro acusado de presunto abuso sexual contra varias alumnas del Instituto Bilingüe La Cañada, localizado en Saltillo, Coahuila, fue despedido por la directora del plantel, Claudia Guadalupe Treviño, a petición de los padres de familia de las afectadas, quienes acudieron a ella para denunciar el hecho.
“Seguí el protocolo que me señala la Secretaría (de Educación), los escuché, iba a empezar investigaciones; el punto es que los padres no me dieron oportunidad. Al día siguiente deciden no llevar a las niñas. Exponían que el maestro estaba tocando a las niñas, no refirieron qué tipo de tocamientos, los escucho y sigo el protocolo”, puntualizó.
De acuerdo con la directora, los padres de familia exigieron el despido inmediato del maestro, que en primera instancia fue removido de sus funciones, pero ante la presión de los ofendidos, finalmente tomó la decisión de despedirlo.
“Lo primero fue sacar al maestro del grupo, pero ellas (las madres de las niñas supuestamente abusadas) no estuvieron conformes; entonces, para tratar de mediar la situación, el maestro es rescindido de esto, porque ellas así lo requerían, lo demás continúa (la investigación), todo continúa con normalidad”, destacó Treviño.
Según información difundida por el diario Zócalo de Saltillo, la directora aclaró que no fueron 12 las niñas afectadas, sino cinco o seis, y reiteró su apoyo al docente al afirmar que sólo las tocó en el hombro, y pidió la colaboración de otros padres de familia, quienes aseguraron que se trataba de calumnias y mentiras en contra del profesor.
“No es posible que cometan esa injusticia por niñas que están chifladas o niñas que no las atienden en su casa. ¿Cómo es posible que se cometa esta injusticia en contra del profesor? No sabemos quiénes son las afectadas, son puros chismes”, comentó Liliana Reyna, madre de familia.
Por su parte, el Departamento Jurídico de la Secretaría de Educación del estado de Coahuila (Sedu), a cargo de Enrique Flores, informó que hasta el momento cuentan con el reporte de un padre de familia y están a la espera de que lleguen el resto de los afectados.
Refirió que el despido del profesor no forma parte de los protocolos que marca la Secretaría, sólo la remoción del puesto.
La directora del Instituto acudió a la Sedu y ahí se contradijo asegurando que el profesor sólo había sido suspendido.
La subdirectora del Centro Estatal de Salud Mental, Mariana Ibarra, señaló que si bien sólo algunas escuelas aplican test a sus próximos profesores, en los que puedan revisar su capacidad y trabajo bajo presión, como lo hacen muchas de las empresas en la entidad, no aplican un diagnóstico psicológico, ni dan un seguimiento durante su desempeño, ignorando las situaciones que pudieran vulnerar a sus alumnos.
“Las instituciones educativas deberían tener un seguimiento de proximidad con las actitudes, desempeños, diferencias o acciones que lleve a cabo su plantilla de profesores. Es casi imposible que no se den cuenta de algún profesor que muestra un trato diferente a ciertas alumnas o que da asesoría a puerta cerrada, e incluso desestimar acusaciones que lo involucren”, comentó.
Al abordar el caso de un profesor de matemáticas, también del Instituto Bilingüe La Cañada Campus Carranza, quien fue acusado de abusar sexualmente de sus alumnas a quienes supuestamente debería brindar clases de apoyo para ayudarlas en esa materia, destacó que aunque un diagnóstico psicológico como tal no podría arrojar si cierta persona es un violador en potencia, sí hay manera de conocer qué haría esa persona teniendo poder.
“Diversos estudios han arrojado que el perfil de una persona que ha llegado a cometer el delito de violación equiparada es una persona seductora, manipuladora y hasta carismática, que en su intento por seducir protege, y una vez teniendo la confianza de la víctima en sus manos, abusa de su poder”, subrayó.
En Coahuila, una docena de casos por abuso sexual se sumarían a las cinco carpetas de investigación que ya se encuentran en la Procuraduría de los Niños, Niñas y la Familia sobre violación equiparada en contra de profesores.
Según la procuradora Yezka Ramírez, existen cinco carpetas de investigación abiertas donde las madres de las víctimas denunciaban una posible vulneración de tipo sexual por parte de los profesores que impartían clases a sus hijas, mientras que la primera orden de aprehensión en contra de un profesor por delito de violación equiparada se concretó este año.
“La ley es muy clara, la violación equiparada es la relación sexual con o sin violencia con un menor de 15 años, mientras que arriba de los 15 años, antes de concretar la mayoría de edad, se considera como estupro, donde se presume que hay un engaño, enamoramiento o condición de ventaja de los profesores sobre sus alumnas y se persigue de oficio”, explicó la procuradora.
Ante esto, exhortó a los padres y a las propias víctimas a denunciar, pues actualmente sí hay manera de acreditar un delito sexual sin violencia a través de peritajes sicológicos e investigación a profundidad del caso, subrayó.
Asimismo, recomendó a los padres de familia reforzar la comunicación y apertura a temas de sexualidad, que pregunten a sus hijos e hijas qué hicieron, con quién platicaron, a quién conocieron, pues en muchas ocasiones los adolescentes o niños que fueron víctimas de una vulneración sexual cayeron frente a un engaño y enamoramiento, aunque no haya registro de violencia física.
También, mantenerse alerta del cambio en los comportamientos de sus hijos y, sobre todo, creerles ante una denuncia, así sea hacia algún familiar o profesor, pues en la entidad, recordó, 83% de los casos en que un menor fue violentado sexualmente, el agresor se encontraba dentro del núcleo familiar.