Consultas pro Rusia promovidas por independentistas desintegran al país; la Unión Europea desconoce los referendos por considerarlos ilegítimos e ilegales y sanciones
Redacción
El ministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguei Lavrov, advirtió que Ucrania se encuentra al borde de la guerra civil y le va a resultar difícil celebrar a fines de mes las elecciones a las que se opone Moscú.
“Cuando los ucranianos matan a los ucranianos, me parece que se está lo más cerca de la guerra civil que se puede estar”, dijo en una entrevista con la cadena de televisión estadounidense Bloomberg, y añadió que en “el este y el sur de Ucrania hay una guerra, una guerra de verdad, en la que se usa armamento pesado”.
“Y si esto ha de conducir a unas elecciones libres y justas, entonces no sé qué significa ‘libre’ y ‘justo’”, agregó el secretario de Estado.
Sin embargo, el canciller aseguró hoy que Rusia no tiene intención de enviar tropas a Ucrania. “No tenemos ninguna intención de enviar ningún destacamento a ninguna parte”, aclaró Lavrov.
Kiev pretende celebrar las elecciones presidenciales el próximo 25 de mayo. Sin embargo, el frágil gobierno de transición formado tras el derrocamiento del presidente prorrusoViktor Yanukovich está enfrascado en una ofensiva contra grupos separatistas, principalmente en el este del país.
Lavrov destacó en la entrevista la oposición de Rusia a una posible incorporación de Ucrania a la OTAN, bloque al que ya se han sumado tres repúblicas ex soviéticas y buena parte de los países del antiguo bloque del este.
“Los intentos de incorporar a Ucrania a la OTAN serán negativos para todo el sistema de seguridad de Europa y estamos categóricamente en contra. Aquí no hay nada que ocultar”, dijo.
“Esta es una cuestión que afecta no sólo a los ucranianos y a la OTAN, sino también a Rusia”, subrayó.
Lavrov comentó, por otra parte, que Rusia tiene “serias sospechas” de que las informaciones sobre la presencia de mercenarios estadounidenses en Ucrania puedan ser ciertas.
Acerca de los habitantes rusohablantes del sureste rebelde de Ucrania, el jefe de la diplomacia rusa dijo que no quieren ser llamados “prorrusos ni proamericanos, quieren ser llamados ucranianos”.
“Cuando tú esperas que te traten como a un igual y te tratan como una basura, como a una fiera, o te ignoran completamente, como lo hicieron las autoridades de Kiev en los últimos dos u otros meses, entonces entiendo a la gente que quiere llamar la atención sobre sus problemas”, dijo.
Por ello, “respetamos -agregó- los resultados de los referendos” de independencia celebrados el pasado 11 de mayo en las regiones de Donetsk y Lugansk.
Profunda crisis política
Los separatistas preparan operaciones contraterroristas para repeler los ataques de las Fuerzas Armadas ucranianas, en el conflicto que se torna cada vez más violento.
La declaración de independencia de Donetsk y Lugansk avanza en la ruptura de Ucrania, sumida en una profunda crisis casi tres meses después de destitución del presidente prorrusoVíktorYanukóvich.
Los últimos episodios de este conflicto son los referendos separatistas realizados el domingo en esas dos regiones, en los que la mayoría votó a favor de independizarse de Ucrania.
Los líderes prorrusos proclamaron la independencia de Ucrania de estas regiones rebeldes. En Donetsk, 89,7% de los votantes se pronunció a favor de la escisión. La cifra asciende a 96% en la vecina Lugansk, según los datos anunciados por los separatistas, que fueron rechazados por Occidente.
Denis Pushilin, uno de los líderes prorrusos de Donetsk, también pidió a Moscú que considere la integración del nuevo Estado independiente en el seno de la Federación Rusa.
En rueda de prensa dijo: “De acuerdo a la voluntad expresada por el pueblo… y para restablecer la justicia histórica, pedimos a la Federación Rusa que examine la cuestión de la integración de la República Popular de Donetsk en el seno de Rusia”.
Proponen nuevo Estado
En marzo, Rusia se anexionó la península de Crimea, que le había pertenecido hasta 1954 y cuya población votó por su separación de Ucrania, inconforme con el cambio de poder en Kiev.
Pushilin dijo a un canal ruso que las dos regiones insurgentes, limítrofes con Rusia, también podrían unirse entre ellas.
En el mitin de independencia celebrado en Lugansk, OlegTsarev, diputado del Partido de las Regiones reconvertido hace unos días en líder del movimiento Sureste, se manifestó por la creación de un Estado llamado Novorossia al que se sumarían otras regiones del sureste rusófono de Ucrania.
A lo que no parecen dispuestas ambas regiones es a dialogar con las autoridades ucranianas, a pesar de que la Cancillería rusa se abstuvo de reconocer la independencia y pidió un diálogo directo entre Kiev, Lugansk y Donetsk para materializar los resultados de los referendos.
Pushilin lo descartó: “No tenemos nada de qué hablar. Ha muerto mucha gente. La matanza de Odessa es una manifestación real del neofascismo”.
Para él, la recién proclamada “república popular tiene intención de formar su propio Ejercito bajo el mando de Igor Strelkov, responsable de la defensa de la rebelde Slaviansk.
El hombre al mando del bastión prorruso en Donetsk, sitiado por las tropas ucranianas, se proclamó jefe del nuevo Estado y anunció una operación contraterrorista contra Kiev. Dio 48 horas para que los soldados ucranianos le declaren lealtad o abandonen la región.
UE amplía sanciones
La Unión Europea (UE) impuso sanciones a un responsable del Gabinete del presidente ruso Vladimir Putin, a miembros de la Cámara Baja y del Servicio de Inmigración, a prorrusos en las regiones separatistas y a dos entes confiscados por Crimea.
Para la UE, las consultas separatistas del domingo en las regiones de Donetsk y Lugansk, en el sureste de Ucrania, son ilegítimas e ilegales.
El titular británico de Exteriores, William Hague, dijo que los votos en el Festival de Eurovisión fueron más creíbles y tuvieron más peso que esos referendos.
Los cancilleres de la UE aprobaron ampliar en 13 personas y dos empresas la lista de sancionados por amenazar la soberanía de Ucrania.
Eso eleva a 61 el total de afectados por la congelación de bienes y la prohibición de viajes a territorio comunitario.
La persona de mayor rango del Gobierno ruso sometida a las medidas restrictivas de la UE es ViacheslavVolodin, primer jefe adjunto de Personal de la Administración Presidencial. De acuerdo con la UE, Volodin, también sancionado por EEUU, es responsable de supervisar la integración de Crimea a Rusia.
También figura entre los sancionados Vladimir Shamanov, comandante de las tropas aerotransportadas y responsable del despliegue en Crimea.
