EDITORIAL A casi cuatro meses de ese fatídico 19 de junio, el caso Nochixtlán ha caído en el fango de las verdades a medias, la ficción y el manipuleo. Se advierte con claridad la intención perversa de quienes manejan la Comisión de Víctimas, de que nunca se sepa la verdad. La perversa negativa a que la Procuraduría General …