La tormenta tropical Gordon, que ya golpeó este lunes las costas de Florida, amenaza con convertirse en huracán antes de alcanzar la costa central del Golfo de México, según informó el Centro Nacional de Huracanes. Este ha provocado lluvias y vientos en el noreste y se espera que alcance los estados de Alabama y Arkansas, además de Luisiana y Misisipi, regiones donde tocará tierra.
La Agencia de Emergencias de Misisipi ha advertido a los residentes estar preparados para una evacuación. La alcaldesa de Nueva Orleans declaró estado de emergencia en la ciudad, y decidió cerrar varias oficinas gubernamentales. Por su parte, Bel Edwars, gobernador de Luisiana, declaró el pasado lunes el estado de emergencia y se comprometió a enviar 200 miembros de la Guardia Nacional a las zonas a las que se prevé que afecte el huracán.
Florence se mantiene como tormenta tropical. Se encuentra a 1 900 kilómetros al noroeste del archipiélago de Cabo Verde (África) y a 2 090 kilómetros al noreste de las Antillas Menores. Tiene una velocidad de traslación de 13 kilómetros por hora, lo que no significa un peligro inminente; sin embargo está monitoreada.
