Por su alta peligrosidad, Joaquín “El Chapo” Guzmán pasará el resto de su vida en una prisión donde durante las 24 horas del día no tendrá ningún contacto con reos, sólo podrá ver el cielo y no lo dejarán tener contacto con su familia
Daniela CHAO
Peor que la pena muerte. El penal ADX Supermax, presumido como el más seguro del mundo por las autoridades de Estados Unidos, es descrito por las autoridades como lo más cercano al infierno. Es en esta prisión donde Joaquín El Chapo Guzmán Loera cumplirá, de inicio, la sentencia impuesta.
Será el preso 377 de ADX Supermax, de Florence, Colorado. A dos horas de Denver. Guzmán Loera no tendrá contacto con reos durante las 24 horas del día.
La celda, de dos por 3.6 metros, tiene una cama, un escritorio de cemento, un inodoro, un lavabo y una ducha.
Se le permitirá un televisor en blanco y negro donde verá programación que no le permitirá saber lo que pasa en el exterior. Programas religiosos, educativos y de interés general.
La única salida autorizada será a un área cerrada para su recreación, donde podrá ver el cielo.
La manutención del Chapo tendrá un costo entre 80 mil y 100 mil dólares al año. También se le impondrán medidas administrativas especiales, pues no podrá ver a su esposa, hijas y madre.
La comida se le suministra a través de pequeños agujeros en la puerta y su contacto con otras personas se limita a los guardias y el personal de la cárcel.
La prisión ADX Supermax posee cerca de 90 celdas individuales de 2.1 x 3.6 metros, construidas con hormigón. Además, los calabozos cuentan con duchas automatizadas, televisor y una sólida estructura en concreto. Actualmente aloja a 376 reclusos.
“Debes de preguntarte qué es peor. ¿Es la muerte peor para un hombre de su edad que va a pasar el resto de su vida en una caja básicamente 24 horas al día? La vida en Supermax es peor que la pena de muerte”, dijo en una entrevista Robert Hood, ex director del penal.
Jeffrey Lichtman, uno de sus abogados, comentó que su cliente fue rápidamente trasladado en helicóptero solo unas horas después de la lectura de su sentencia el miércoles en la ciudad de Nueva York.
Desde que fue extraditado a Estados Unidos en 2017 para ser procesado por cargos relacionados con narcotráfico, se han tomado medidas de seguridad extremas.
FUGAS HISTÓRICAS
Cumplirá la sentencia en la prisión federal ADX Florence en Colorado, la cárcel más segura de Estados Unidos, después de que escapó dos veces de prisiones de máxima seguridad en México.
ADX es la única prisión con la etiqueta Supermax porque desde su apertura en 1994 nadie ha logrado escapar.
«Está muy bien diseñada para su propósito, retener a los delincuentes más peligrosos del sistema penitenciario federal», dijo Martin Horn, profesor del John Jay College of Criminal Justice y excomisario del Departamento Correccional de la ciudad de Nueva York.
El profesor señaló que, en sus dos fugas anteriores, Guzmán Loera ha demostrado que puede tener un mayor riesgo de escape que cualquier otra persona. “Eso hace de ADX Florence un lugar apropiado para él”.
La primera fuga la realizó en 2001. Se escapó del penal de Puente Grande, en Jalisco, en un carrito de lavandería con la ayuda de funcionarios del lugar a los que había sobornado.
La segunda vez fue en 2015. Escapó de la prisión del Altiplano utilizando un túnel de más de 1.6 kilómetros de largo que comenzaba en el baño de su celda. Se publicó que construía un nuevo túnel en esa misma prisión para intentar una tercera fuga.
Pese a que nadie ha escapado de esa prisión en Colorado, el profesor considera que las dos fugas de Guzmán Loera de prisiones de máxima seguridad en México, ponen a prueba a este penal, construido en 1994.
“El Chapo es diferente a los más de 180 mil presos federales, debido a su dinero, su fama, sus conexiones con gente de todo el mundo. Entonces, esto será un desafío, incluso para la Supermax”.
Estima que sólo estará ahí un par de años, antes de que una nueva Supermax sea diseñada y lo trasladen a una prisión con alta tecnología.
Las dos prisiones previas de máxima seguridad, Alcatraz Island y Federal Penitentiary, en Marrion, Illinois operaron 30 años y ADX está a cinco años de alcanzar ese plazo.
Los sobornos, característicos en la operación del capo, también representan un riesgo con su llegada a la llamada Alcatraz de las Rocosas.
El excomisario admitió que la mayor debilidad es el elemento humano. “Para alguien que gana 45 mil dólares al año, que sea motivado al soborno. Esta es la mayor preocupación para el buró federal de prisiones”.