Aun cuando la Secretaría de Seguridad Pública estatal, ha ejercido en 2017 un presupuesto superior a los mil 84 millones de pesos, 178 millones de pesos más de lo que le fue aprobado por el Congreso del Estado, el gobierno de Alejandro Murat ha fracasado en este rubro; lejos de avanzar en el combate a la delincuencia siguen a la alza homicidios, secuestros feminicidios, linchamientos, robos y la presencia de grupos del crimen organizado que se disputan la plaza y se pasean de manera impune por las calles de la entidad
REDACCIÓN
Policías que roban, linchamientos, feminicidios, homicidios, secuestros, un comando armado que se pasea en camionetas por las principales calles de Loma Bonita y asaltos violentos, son sólo algunos de los miles de delitos ocurridos en territorio estatal en este 2017, el primer año de gobierno de Alejandro Murat.
El Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, reporta que entre enero y octubre se han denunciado 25 mil 695 crímenes en la entidad, de los que 38 están tipificados como secuestros, lo que representa un incremento del 16 por ciento con respecto al 2016, en la comisión de privación ilegal de la libertad.
Las promesas de campaña del mandatario estatal, que inclusive firmó ante notario, parecen haber quedado en el pasado, y la seguridad pública se convirtió en uno de los grandes pendientes con la ciudadanía.
Pese al incremento de la inseguridad y la falta de respuesta por parte de las autoridades, la Secretaría de Seguridad Pública es la quinta dependencia de gobierno que recibe la mayor cantidad de recursos.
De acuerdo al avance trimestral de la Cuenta Pública 2017, tomo I, la instancia ha ejecutado un presupuesto por mil 84 millones, 674 mil 570 pesos, lo que representa 178 millones de pesos más de lo aprobado por el Congreso del Estado.
El monto ejercido por la institución que encabeza el capitán de la Secretaría de Marina, José Raymundo Tuñón Jáuregui, representa 20 veces el recurso destinado al Hospital de la Niñez Oaxaqueña en el mismo periodo de tiempo.
No obstante, la inversión no ha repercutido en el combate a grupos delincuenciales que inclusive, se encuentran incrustados dentro de la misma policía.
Rancho “La engorda”
El hecho más emblemático de la problemática que atraviesa Oaxaca en materia de inseguridad, es el asalto al rancho “La engorda”, ubicado en el kilómetro 39 de la carretera Palomares, perpetrado por elementos de la Policía Estatal.
En este lugar, el pasado mes de octubre, los uniformados que se trasladaban en las patrullas con los números 1910, 1914, 1884, amagaron y torturaron al velador, al tiempo que sustrajeron pertenencias de valor del propietario: joyas, 60 mil pesos en efectivo, equipo de cómputo y hasta loros.
El video presentado por Imagen TV en el noticiero de Ciro Gómez Leyva, permitió exhibir los sucesos de los que ya se tenía conocimiento en la zona de Tuxtepec: atracos perpetrados por uniformados, y que pese a las denuncias ciudadanas, continuaban ocurriendo.
Los elementos, de acuerdo a Tuñón Jáuregui, fueron separados de sus funciones y puestos a disposición de la Fiscalía de Justicia del Estado.
Tuxtepec ensangrentado
La región que ha resentido el mayor número de crímenes en este 2017 es Tuxtepec, donde la población se protege de policías y narcos por igual.
En Loma Bonita y localidades aledañas, los ajustes de cuentas y cuerpos expuestos en la vía pública con signos de tortura y el tiro de gracia, se han vuelto cotidianos.
De enero a octubre de este año, el Secretariado Ejecutivo ha registrado 579 homicidios dolosos con arma de fuego en toda la entidad, de los que al menos 100 ocurrieron en esta región, de acuerdo a reportes hemerográficos.
Además de los asesinatos, a fines de octubre de este año, un comando armado que se paseó por las principales calles de Loma Bonita, advirtió a la población civil la presencia y toma de control de la localidad por parte del “Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG)”.
A través de un video que circuló en redes sociales, se dio cuenta de una caravana de hombres armados en cuyos vehículos se encontraban rotuladas las siglas CJNG. Los presuntos criminales pegaron cartulinas en lugares públicos, para “informar” a la sociedad de su llegada, así como la “limpia de secuestradores y ratas” que emprenderían.
El gobierno del estado y federal, respondieron con declaraciones a estos sucesos, sin que hasta el momento se hayan tomado medidas para restablecer la seguridad en la región, de tal forma que los homicidios y desapariciones continúan casi diariamente.
En aumento feminicidios
“El primer año del gobierno de Alejandro Murat ha sido el más violento en cuanto a feminicidios”, advierten organizaciones de la sociedad civil.
Consorcio para el diálogo parlamentario y la equidad, registró 120 asesinatos de mujeres y niñas lo que representa la cifra anual más alta en la historia de Oaxaca, con un incremento del 30 por ciento comparado con el primer año de gobierno de Gabino Cué, señala el organismo.
“En nuestro estado, los Valles Centrales es la región en donde se comete el mayor número de feminicidios: 32 en el primer año de gestión del mandatario; seguido del Istmo en donde se cometieron 24 y de la Costa, en donde se contabilizaron 20”, apunta la ONG.
Y agrega que en el 56 por ciento de los feminicidios, las mujeres fueron asesinadas a balazos, por lo que cuestiona el control del estado respecto al tráfico de armas, así como el aumento del crimen organizado y el control sobre la entidad.
“Resulta evidente que en la práctica, las autoridades son omisas e ineficaces para impulsar una política pública integral que evite que la espiral de violencia contra las mujeres siga creciendo. Por otro lado hay una intención gubernamental de invisibilizar la gravedad de los feminicidios en Oaxaca a la hora levantar las denuncias, pues no se han seguido los criterios del protocolo de feminicidio aprobado para el tratamiento de estos delitos. La falta de voluntad y capacidad para investigarlos como feminicidios arroja cifras muy por debajo de los reales”, advierte la agrupación.
Linchamientos
En el último mes, cuatro personas han sido linchadas en la entidad. A principios de noviembre, en San Mateo Macuilxóchitl, tres presuntos ladrones fueron detenidos por la población, golpeados, rociados con gasolina e incendiados.
La policía estatal intervino en el rescate de los hombres hasta que habían sido quemados en el basurero de la población perteneciente a San Jerónimo Tlacochahuaya, Tlacolula de Matamoros y canalizados al hospital general Aurelio Valdivieso, donde murieron horas y días después.
El segundo caso que dejó como saldo una víctima ocurrió apenas el 4 de diciembre, cuando un hombre que fue sorprendido presuntamente robando, fue detenido por pobladores de San Martín Mexicapam.
La multitud golpeó y amarró a un poste al supuesto ladrón, de donde fue rescatado horas después por elementos de la policía municipal de Oaxaca de Juárez y trasladado al hospital de la Cruz Roja, donde falleció horas después.
Sin embargo, a lo largo del año se han registrado intentos de linchamientos. En septiembre, el agente del ministerio público de la Heroica Ciudad de Tlaxiaco, Alberto Mejía, fue golpeado, desnudado y agredido por la población, luego que lo confundieran con un ladrón.
Y es que el servidor público en estado de ebriedad, abrió una camioneta y se introdujo para dormir, cuando fue descubierto en la mañana, fue golpeado. Éste es el único caso de intento de justicia por propia mano en el que se tiene registro de detenciones de participantes en el acto común.
Delitos en aumento
El Semáforo Delictivo Nacional, ubica a Oaxaca entre los primeros 10 de estados del país con más homicidios (tasa por cada 100 mil habitantes) en los tres trimestres de este año, con una incidencia de 17.6.
Mientras que en lo referente a secuestro, la entidad se ubica en el séptimo lugar con un indicador de .9.
La nota roja de los diarios locales da cuenta del fracaso en materia de seguridad, así como los videos difundidos a través de redes sociales, en los que asaltantes ingresan a taquerías, o bien, roban con lujo de violencia en las calles.
Entre enero y octubre de este año, el Secretariado Ejecutivo, registró mil 36 robos con violencia a transeúntes, mientras que durante todo 2016, este delito se denunció 937 veces, lo que representa un incremento, sin que haya concluido aún el año.
Las cifras revelan la problemática que vive Oaxaca en materia de seguridad, sin embargo, en regiones como Tuxtepec, la violencia se ha convertido en un impedimento para transitar con libertad en las comunidades.
La sociedad padece una crisis derivada del fracaso gubernamental por establecer mecanismos que garanticen la tranquilidad de la población, mientras el secretario de Seguridad Pública estatal, Raymundo Tuñón a través de redes sociales, lamenta el suicidio de un elemento policíaco, luego que cometiera un feminicidio.
