Sears Holdings Corp., el minorista de 125 años conocido por sus marcas Kenmore y DieHard, cayó en bancarrota por la presión de su alta deuda y muy pocos compradores.
La compañía solicitó la protección de los acreedores ante el Tribunal de Quiebras de Estados Unidos en Nueva York. El director Ejecutivo Eddie Lampert y su fondo de cobertura, ESL Investments Inc., tenían aproximadamente 2 mil 500 millones de dólares en deuda de Sears a partir de septiembre, resultado de múltiples intentos de mantener la cadena a flote.
La cadena de tiendas departamentales llegó a ser el mayor minorista de Estados Unidos, ya que su reputación estaba basada en su garantía de devolución de dinero para satisfacer a sus clientes. Pero no fue capaz de mantenerse al día con los cambiantes hábitos de los consumidores, ya que sus rivales en línea atrajeron a los compradores y los esfuerzos de la firma por cambiar se vieron obstaculizados por montañas de deudas. Desde 2012, las pérdidas de la empresa han superado los 10 mil millones de dólares.