Maricel Sequeira
SAN JOSÉ Costa Rica.- Ucrania es un país con el corazón herido por dos deseos opuestos entre sí, aunque no deberían serlo: por un lado, vivir bajo las normas y los principios de la Unión Europea, por otro, tener negocios y una relación espléndida con su hermana Rusia. Lo que los hace imposibles es el miedo.
El embajador concurrente de Ucrania en México, RuslánSpírin, estuvo en San José Costa Rica para participar en los actos de traspaso. En entrevista explicó porqué, según la óptica de su gobierno, Rusia estaría dispuesta a desintegrar a Ucrania antes que permitir que entre al bando occidental.
También asegura que Rusia invadió con agentes de inteligencia su país. Estos agentes, dice, son los que dirigen todos los movimientos separatistas.
Supuestamente empezaron a llegar en un momento en que el país atravesaba una de sus numerosas crisis políticas, cuando el presidente prorruso, Víktor Yanukovich huyó del país debido a las protestas que se desataron cuando decidió no firmar el acuerdo de asociación con la Unión Europea (UE).
¿Cómo explica la crisis por la que está pasando su país?
En 1994, Ucrania entregó sus armas nucleares, a pesar de ser la tercera potencia nuclear, al firmar el Tratado de Budapest, en el cual Rusia, Estados Unidos y Gran Bretaña se comprometen a garantizar la integridad territorial de Ucrania y a no amenazar ni lanzar sus fuerzas armadas contra Ucrania. Al invadir Crimea, Rusia destruye todo el sistema del derecho internacional. En este momento, hay muchos agentes de inteligencia rusos en el país, los llamados “turistas de Putin”, que son los que llaman prorrusos, pero no son pro, son rusos.
-Un analista costarricense señaló que Rusia necesita de Ucrania para ser europea y que, por la misma razón, no le conviene desmembrar a Ucrania. ¿Cómo ve este planteamiento?
El plan de Rusia es recuperar todos los terrenos posibles, no sólo de Ucrania, ellos quieren los territorios con todo lo que producen. La URSS (Unión Soviética) tenía la política de dividir la producción en diferentes países. Así por ejemplo, algunas fábricas de producción de maquinaria pesada están en Ucrania y otras en Rusia. Si recuperan esas regiones, tendrán los procesos de producción completos.
”Ucrania quiere ser europea y esto afecta a Rusia, que teme mucho la aproximación de la OTAN a su territorio porque es la fuerza militar que la puede enfrentar. Si Ucrania fuera parte de la Unión Europea, la OTAN estaría en la frontera rusa; por eso, tratarán de evitar a toda costa las elecciones del 25 de mayo. Fragmentar el país es la forma más simple de lograr mantener a la UE alejada. No lo dice, pero Rusia tiene miedo de la OTAN”.
-¿Se prepara su gobierno para una guerra civil que ya se perfila?
Estamos haciendo todo lo posible para evitar lo peor, la guerra. Estamos trabajando conjuntamente con la comunidad internacional. El 17 de abril tuvimos un encuentro en Ginebra para evitar toda confrontación, pero Rusia no ha hecho nada por cumplirlo.
“Siempre dicen lo mismo; dicen una cosa y hacen otra, dicen que retiran las tropas, pero los satélites pueden detectar que las tropas siguen ahí, en la frontera.
”La doctrina de la guerra habla de engañar al rival, de hacer lo que sea para engañarlo y eso es lo que hace Rusia. Parece que desde hace 23 años, que se desintegró la URSS, vienen planeando esto. Nadie cree en Rusia, pero a ellos no les importa; tampoco les importan mucho las sanciones financieras”.
¿Quiere decir que las sanciones no les afectan?
Les molestan un poco, personalmente, pero no pierden mucho dinero; tienen suficiente. Sin embargo, la economía de Rusia sí pierde mucho. En los últimos dos meses fueron retirados cerca de $150 mil millones de inversionistas.
Y si las sanciones no les quitan el sueño, qué opciones quedan?
La economía rusa depende 85% de los hidrocarburos. Rusia es una gasolinera mundial. En tiempos de la URSS cayeron los precios del petróleo y el sistema colapsó. De la misma forma ahora, si los precios bajan a $90 el barril (están por $117) colapsa la economía rusa.
“¿Cómo hacerlo? Permitiendo que la oferta supere la demanda. En eso consistirán las próximas sanciones contra Rusia”.
-¿Rusia está exigiendo pago adelantado del gas? Tiene Ucrania recursos para esto?
Es un golpe duro. Con esto, Rusia está manipulando no sólo a Ucrania sino a toda Europa. Puede subir los precios, bajarlos, cerrar las llaves o no dar la cantidad necesaria. Con eso están jugando desde hace mucho. Ahora, que creen que Crimea es de ellos, nos suben hasta casi $500 la tonelada de gas. Pero tenemos opciones. EE. UU. ofrece vender gas a Europa y hay otros países alrededor de Rusia como Azerbaiyán, que tiene petróleo y puede vender a Ucrania a precios razonables. Así vamos a sobrevivir.
¿Cree posible recomponer la convivencia de su país con Rusia?
Estamos buscando cómo recuperarla. Tenemos una historia de miles de años juntos; nuestros pueblos están integrados uno al otro. Somos pueblos hermanos, no sólo amigos; nunca Ucrania tendrá problemas con Rusia en sentido personal o entre los pueblos; hablamos de un conflicto con los políticos. Con Rusia sí, queremos hacer negocios porque estamos mezclados, integrados. No podemos vivir uno sin otro. Al mismo tiempo, queremos seguir con los valores y los derechos europeos; esa es nuestra tarea principal. No podemos desistir de la OTAN por las acciones de Rusia, con la cual no hay garantías para nada.
¿Se siente Ucrania protegida por Europa, a la luz de los negocios entre la UE y Rusia? Cito, por ejemplo, los grandes capitales rusos en Gran Bretaña y la actual venta de barcos de guerra franceses a Moscú.
Ucrania no puede sentirse segura desde que Rusia violó el Tratado de Budapest y no pasó nada. No estamos seguros, pero al mismo tiempo sentimos todo el apoyo político y financiero de toda la comunidad internacional.
¿Los separatistas hacen hoy un referéndum en el este. Se repetirá lo de Crimea?
En Crimea, el referéndum fue ilegal y nadie lo reconoce. Igual este no será reconocido. No podemos permitir que los 500 rusos que hay ahí determinen el futuro de la región; no lo vamos a permitir. Todo el país está unido para proteger sus familias de estos agentes que obligan a votar con una Kalashnikov en el brazo.