Mokhtar Hosseiniamraei detuvo su automóvil en un aparcamiento subterráneo en Sídney, Australia A su lado estaba su esposa, Leila Alavi, quien había decidido dejarlo hacía tres meses. Él le dijo que pretendía hablar con ella.
Era enero de 2015 y la pareja discutía acaloradamente. Sin ningún tipo de advertencia, el hombre, refugiado iraní, sacó un par de tijeras y comenzó a apuñalar a la mujer. Fueron 56 veces en total.
Ambos se conocieron en Turquía en 2010, luego de que Hosseiniamraei debiera abandonar Irán por cuestiones religiosas. Allí, decidieron vivir juntos, pero las cosas comenzaron a ir mal. Hacia fines de 2014, sus vidas siguieron por separado y él comenzó a ingerir drogas a diario.
Ella comenzó a temer por su vida y lo denunció luego de un dramático llamado telefónico: «Eres una puta, voy a matarte y a arreglar a tu hermana y tus amigos que te han convertido en esto», fueron las tenebrosas palabras de su ex. Realizó una denuncia y consiguió que se mantuviera alejado de ella por una orden policial.
Comenzó a llamarla por teléfono, a acosarla. «Una cacería», tal como relataría un familiar de Alavi. La joven trataba de evitarlo, pero cada día era más complicado. Tres meses después de la separación, Hosseiniamraei se hizo presente en la peluquería donde Alavi trabajaba y la instó a encontrarse con él en el auto.
En el Astra del iraní, la joven de 26 años fue apuñalada 22 veces en su cabeza y cuello, 27 en el rostro y las piernas y siete en las manos y hombros, según reportó el diario Sydney Morning Herald.
«La apuñalé en el corazón, y en su cuello, porque no obedecía la regla del matrimonio», confesó Hosseiniamraei a la policía luego del homicidio. «Cuando nos casamos tomamos un compromiso, un compromiso moral tras otro. Pero en este país eso no significa nada», añadió.
Antes de que la tragedia ocurriera, la familia de Alavi estaba preocupada por la integridad de la joven peluquera, quien había viajado a Australia en busca de una «vida mejor». «Vi que ella era abusada tanto física como psicológicamente por él. Creo que este hombre era cruel y peligroso», indicó su hermana Mitra Alavi al mismo diario de Sídney.
Este jueves, Hosseiniamraei fue declarado culpable por el asesinato de su mujer durante una audiencia ante la Suprema Corte de New South Gales, Australia. Falta conocer por cuántos años será condenado.
