El coordinador estatal de Protección Civil, Felipe Reyna Romero precisó que uno de los problemas más fuertes que encuentran es que no hay personal capacitado
José HANNAN ROBLES
El corto tiempo que duran algunas autoridades municipales, sobre todo las electas por el sistema de usos y costumbres, una forma de autogobierno practicada en muchos municipios de población indígena, complica la integración de las coordinaciones municipales de protección civil, indicó Felipe Reyna Romero.
El coordinador estatal de Protección Civil, explicó que estas administraciones que duran un año o un poco de más tiempo, obliga que se renueven consejos municipales con la misma frecuencia.
En el estado hay 418 municipios que se rigen por el sistema de usos y costumbres y 152 por el régimen de partidos políticos, estos últimos no representan mayor problema porque duran tres años.
Citó que algunos presidentes municipales alegan: “no quiero conformar mi Consejo de Protección Civil, porque yo ya me voy”.
Señaló que otro problema al que se enfrenta la Coordinación Estatal de Protección Civil, es que una gran parte de las autoridades municipales no tienen a la persona idónea para que funjan como coordinadores de protección civil, “con este problema nos topamos, no a veces sino siempre, en los municipios, porque de forma personal he estado visitando el interior del estado y es preocupante esta situación”, refirió.
Reyna Romero expuso que se capacitan a los Consejos Municipales dependientes de administraciones que duran tres años, adiestramiento que se hace año y medio después de haber comenzado la administración municipal, por lo que ejercen solamente año y medio.
Anunció la posibilidad de que a fines de este mes presenten ante el Fondo para la Prevención de Desastres Naturales (Fopreden), un proyecto de fortalecimiento de la infraestructura de la Coordinación Estatal de Protección Civil, el cual se encuentra debidamente terminado.
Comprende, explicó, dos vertientes: el refuerzo de la estructura con 16 delegaciones y, lo referente a la radiocomunicación renglón, que reconoció, es muy deficiente.
Habló de la importancia que juega en la actividad de protección civil, los grupos de WhatsApp, que han funcionado en los desastres, emergencias y contingencias, con los cuales se tiene prácticamente la información de todo el estado.
Puso como ejemplo el accidente automovilístico que sufrieron unos jóvenes deportistas en la Costa, donde el WhatsApp les permitió operar con los Servicios de Salud de Oaxaca. El delegado antes de salir de Puerto Escondido hacia el lugar donde sucedió el accidente, activó los hospitales para que estuvieran listos para recibir a los heridos, como parte del protocolo que se deben de realizar en estos casos.
De igual forma, agregó, con la explosión suscitada en la refinería de Salina Cruz, donde se actuó muy a tiempo, principalmente con las autoridades municipales de ese puerto y las de Tehuantepec.
El entrevistado sostuvo que al hacerse cargo de la Coordinación de Protección Civil, a mediados de mayo de 2014, se habían conformado 90 coordinaciones municipales de protección civil, número que actualmente se ha elevado a 385.
Reconoció que la coordinación a su cargo no tiene la capacidad ni el personal para llevar una revisión en materia de protección civil de las tiendas, hospitales, hoteles, restaurantes, oficinas, edificios con gran concentración de personas, sin embargo, se trabaja con los directores responsables de obra para firmar con ellos un convenio y se hagan responsables de los inmuebles que intervienen, contemplándose en estos las instalaciones eléctricas, de gas e hidráulica.
Al referirse a las escuelas oficiales, informó que de las aproximadamente 13 mil que funcionan en el estado, 2 mil cuentan con programas internos.
Está por concluirse un programa de protección civil para que los directivos de los centros escolares se capaciten y se garantice la seguridad de los educandos.