Tras el anuncio de la Secretaría de Gobernación (Segob) de implementar un operativo de «acciones específicas» que busca «garantizar a los ciudadanos las condiciones que les permitan ejercer su voto de manera libre y pacífica en todo el país», el próximo domingo, siete aviones con elementos de la Policía Federal y del Ejército Mexicano, así como patrullas vía terrestre y barcos, arribaron a Oaxaca.
Y es que esta mañana, la Asamblea Estatal de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) consideró que las respuestas otorgadas por la Segob a la mesa de negociación son mínimas e insuficientes, por lo que determinó continuar con el boicot electoral que mantiene los 11 distritos electorales bloqueados, así como la Junta Local.
Ante ello, emplazaron a la dirigencia sindical a obtener mayores respuestas, y mantuvieron bloqueado por quinto día consecutivo la planta abastecedora de combustible de Petróleos Mexicanos (Pemex) que surte a la capital y región de Valles Centrales, ubicada en el municipio de Santa María El Tule.
Aunque la CNTE había ofrecido la apertura de los accesos por dos horas de las instalaciones de Pemex para la salida de pipas con combustible, que permitiera surtir a las estaciones de servicio, la empresa rechazó la oferta, al considerar que se carece de seguridad en la entidad.
Por la llegada de los uniformados, integrantes de la Sección 22 se replegaron al Zócalo de la capital y abandonaron las Juntas Distritales del Instituto Nacional Electoral (INE), así como la planta de Petróleos Mexicanos que tenían bloqueadas desde el 1 de junio.
FLOR HERNÁNDEZ/FOTOS:JAIRO ARAGÓN
