Manuel Guzmán García, director de Normatividad de Comercio en Vía Pública, sentenció que procederá contra todos aquellos a quienes les ha generado riqueza inexplicable
José HANNAN ROBLES
Fotos: Jairo ARAGÓN
El director de Normatividad de Comercio en Vía Pública, Manuel Guzmán García aseguró que no será cómplice ni complaciente con nadie en relación a la reordenación que emprenderá con el comercio en vía pública, “si a alguien le genera riqueza inexplicable voy a actuar, a proceder y lo voy a denunciar, esa es mi postura y mi posición en este sentido”.
“No venimos a perder el tiempo, de verdad lo digo, venimos a aplicar la normatividad, hasta dónde lo pueda hacer pues está muy relacionado con la capacidad y gobernabilidad”, expresó.
Negó connotación a los líderes de ambulantes
En relación a los intereses de los líderes del comercio en vía pública refirió que no les daba una gran connotación, “siento que si transgreden las reglas jurídicas que nos rigen tendrán que ser demandados, aplicarles la ley, no son situaciones que a mí me preocupen porque tendré que hacer lo que a mí me corresponde”.
“No soy un hombre que se haya caracterizado por una debilidad de carácter o por falta de pulso para ejercer las funciones que me corresponden, estamos caminando de manera muy segura, no queremos tomar acciones superficiales”, despejó.
En entrevista, el funcionario municipal destacó que es muy complicado el ambulantaje, porque está muy relacionado con la pobreza, la marginación, con la exclusión, pero también hay que entender que esos ingredientes han propiciando la evolución de muchos grupos, de bastantes organizaciones que están permanentemente actuando y robusteciendo el asunto del ambulantaje.
Reconoció que hay gente que ha creado sus derechos por antigüedad y por los antecedentes que tiene, “entendamos que la economía que genera el comercio en la vía pública es muy importante, pero tenemos que tener cuestiones regulatorias muy determinantes, es un asunto que creo va transitando de la improvisación, del empirismo ya por caminos ciertos, de instancias del gobierno municipal que tendrán que determinar qué hacer y cómo hacerlo”.
Luego de reconocer la confianza que el presidente municipal, Javier Villacaña Jiménez depositó en él, al invitarlo a colaborar en su administración, dijo que abordará lo relacionado al comercio fijo, semifijo, ambulante y toda manifestación de comercio de alguna manera informal que ocupa espacios físicos determinados de la ciudad.
Tenemos que actuar de acuerdo a lo que dice el Bando de Policía y el reglamento de vía pública, agregó.
No habrá complacencias con nadie
En este escenario, Guzmán dio a conocer que se está poniendo en práctica una serie de acciones que permita elaborar un diagnóstico real, preciso y conciso de lo que sucede en el ambulantaje para marcar prioridades y buscar la solución para la compactación y reducción de puestos, para que el ciudadano disfrute de las banquetas, la vía pública, la vialidad, el tránsito, la seguridad.
Sostuvo que el presidente Villacaña Jiménez tiene la visión de que se hagan las cosas bien en beneficio de la ciudad y sus habitantes, lo que respaldará con su función bien direccionada, sin temores, sin complacencias, sin impunidad, “respeto a todo aquel que ha hecho de la actividad en la vía pública su manera de subsistir, pero también me queda muy claro que todo lo que atenta contra la legalidad debe ser denunciado, y se tiene que actuar de manera contundente”.
Expuso que la postura del titular del Gobierno Municipal es que se realicen las indagaciones necesarias para saber realmente quién está atrás de cada puesto, cuáles son las organizaciones que actúan, y cuáles con los preceptos legales a los que se tienen que sujetar.
Ningún compromiso con comercio en vía pública
Afirmó que la actual administración municipal, desde sus inicios, no tiene ninguna relación de manera oficial menos global con los comerciantes en vía pública, y no se les ha pedido contribuciones económicas que deben cumplir con el Ayuntamiento por materia de servicios, Se ha mantenido en investigación lo que la administración anterior entregó.
En esa situación de análisis y de diagnóstico se está caminando, “en lo personal tengo la intención muy categórica de que se dé un reordenamiento lo más rápido posible y también lo más eficiente para todos”.
Explicó que el Presidente tiene planes muy importantes para darle un canal al comercio en vía pública, consolidarlo en otras instancias, en otras posibilidades, en otras esferas del comercio, de tal manera que eso le vendrá a dar agilidad y certeza que debe transitar en otros conceptos.
El director de Normatividad de Comercio en Vía Pública, expresó que muchas de las personas que regentean los puestos, son solamente encargados.
Son situaciones que se dan, abundó, “tenemos desgraciadamente el mal referente que dejó la administración anterior, a un mes 15 día que estoy al frente de esta responsabilidad, estamos muy metidos en labor de inteligencia, estamos investigando, detectando, y de verdad sí voy a actuar. Aquí queda muy claro una cosa, todo lo que está en la vía pública es responsabilidad de la Dirección de Normatividad”.
La rentabilidad de lo que pienso hacer y cómo hacerlo está precisamente en normar los giros, las dimensiones, las ubicaciones físicas, y será congruente con los derechos que tienen los ciudadanos a transitar con libertad, a que se respete las banquetas, todo la movilidad urbana y a los comerciantes establecidos, planteó.
Es un asunto de muchos años, le estoy apuntando no a las organizaciones, no a los personajes, si no a la normatividad, a mí sí me interesa saber quién está detrás de cada puesto, de hueso y carne, saber nombre y apellidos, adelantó.
“Es una situación que estoy convencido de que es muy complicado pero estamos también acostumbrados a los grandes retos y a dar los mejores resultados”, refirió.
Reiteró que el objetivo no es quitarle el espacio o la forma de vida a la que vende empanadas o a la que expende frutas, a la que se gana la vida de esa manera, sino que se ajusten a la normatividad, esa es la palabra mágica, normatividad, afirmó.
Mostró su respeto y consideración para la gente humilde, los pobres, las personas que dentro del campo del comercio en la vía pública ha encontrado una alternativa, a veces muy injusta, porque son jornadas de trabajo a veces extenuantes que les produce una ganancia mínima, ahí es donde tenemos que trabajar.
Invasión del Zócalo y la Alameda, cuestión ajena al Municipio
Para Manuel Guzmán, la ocupación del Zócalo y la Alameda de León, es algo muy ajeno al Gobierno Municipal. Lo que está pasando es patético, tal pareciera que existen grupos de oaxaqueños que buscan la manera ventajosa de estar en un lugar para generar un ingreso y otros se andan despedazando en buscar espacios para poderse ganar la vida, comentó.
Estos dos espacios, apuntó, Zócalo y Alameda, en materia turística son estratégicos “están ahorita repletos de una condición de carácter muy irregular en la cual el Gobierno del Estado necesita meter mucho las manos para generar un ordenamiento”.
Es competencia del Municipio todo lo que sucede en su espacio físico, pero en este asunto que es de carácter estrictamente político se ve desplazado, despejó.
Consideró que la situación actual del Zócalo y la Alameda es un mosaico de la ingobernabilidad, del desorden, de la tolerancia extrema y del abuso de organizaciones para aprovechar situaciones gremiales, y hacer de esos espacios físicos un reducto irregular e ilegal para la captación de recursos en donde el que menos sale ganando es el que está atrás de un puesto”.
Fue categórico al señalar que se tienen que dar golpes de gobierno para recobrar el orden y la viabilidad en Oaxaca, ya que no se puede seguir siendo la entidad federativa del desastre y del caos, así como tampoco el estado más pobre del país al que se le cortan las posibilidades de desarrollo de manera permanente.
Oaxaca, agregó, no puede seguir siendo el estado de la marginación, de la exclusión social, del exterminio y de la ilegalidad “donde nos nutrimos los ciudadanos de esperanzas, las cuales se ven cortadas por falta de gobierno y de dirección, no podemos seguir siendo el estado sujeto al capricho de 70 o 90 mil personas cuando somos más de tres millones de habitantes”.
Respeto a la agresión que sufrió Daniel Camarena Flores, coordinador de inspectores, por parte de integrantes de la organización 14 de junio, sentenció que la violencia no debe de darse como una práctica ni social ni política, pues no es el conducto para resolver los problemas.
“Entiendo que un funcionario público se da a la tarea de cumplir con su deber, con sus obligaciones, lo que a veces no gusta pero no por eso se le tiene que agredir, ofender o lastimar”.
Cada quien es responsable de sus propias características como persona, como funcionario, y cada organización también es responsable de lo que hace y de las infracciones que puede cometer, reflexionó.