Un mexicano más murió por las heridas sufridas en el tiroteo del pasado sábado en El Paso, Texas, informó el canciller Marcelo Ebrard.
“Juan de Dios Velázquez Chairez, originario de Zacatecas. Nuestras condolencias a su familia y amigos. 8 connacionales han muerto como resultado del acto terorrista del sábado”, dijo en Twitter.
Más temprano este lunes, la policía de El Paso, Texas, informó que el número de muertos ascendía a 22, tras sumar dos fallecidos más este día.
En 24 horas en Estados Unidos se registraron dos tiroteos masivos que volvieron a centrar la atención en el control de armas y, dadas las presuntas opiniones antiinmigrantes del tirador en Texas, elevaron el tema de los peligros del discurso de odio.
La policía arrestó el sábado a un hombre de 21 años por ser sospechoso de abrir fuego con un rifle de asalto en una tienda Walmart en El Paso, Texas.
Patrick Crusius, presunto autor de los hechos, condujo cientos de millas desde su hogar cercano a Dallas para llevar a cabo el ataque en la ciudad hispana en la frontera entre Estados Unidos y México.
Desde el inicio la acción fue considerada por la policía texana como un potencial crimen de odio; sin embargo, las autoridades federales estadounidenses lo tratan ya como “terrorismo interno”.
La condena podría ser la pena de muerte, ya que los fiscales de Texas pedirán dicho castigo.
Para el presidente Donald Trump los tiroteos masivos en Texas y Ohio fueron “ataques nefastos” y “crímenes contra toda la humanidad” e hizo un llamado a que ambos partidos (Republicano y Demócrata) cooperen para responder a la epidemia de violencia armada, aunque dio pocos detalles del plan de acción.