Washington. Las negociaciones para evitar la imposición de aranceles el próximo lunes generaron elementos de una propuesta tentativa de concesiones de México para complacer al régimen de Donald Trump, incluyendo el envío de 6 mil integrantes de la Guardia Nacional a su frontera sur y un mecanismo para obligar a solicitantes de asilo a retornar al primer país que cruzaron.
Pero todo aún es tentativo, ya que persisten diferencias marcadas entre representantes de ambos gobiernos, y tal vez aún más importante es que nadie puede confirmar que estos y otros elementos serán suficientes para complacer a Trump, quien sigue de gira por Europa (su regreso está programado para este viernes).
Al referirse a las pláticas con México, ayer el mandatario estadounidense declaró: ellos nos necesitan a nosotros; nosotros no los necesitamos. Agregó que por eso no está preocupado por el posible impacto negativo de los aranceles sobre el acuerdo de libre comercio.
Por su parte, el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, en comentarios a medios de comunicación al salir del Departamento de Estado ayer por la tarde, confirmó versiones de que su gobierno desplegará más tropas a la frontera sur de México.
Comentó que le explicó a la contraparte estadunidense sobre la formación de la Guardia Nacional y sus funciones, y que entre sus coordinaciones regionales está la frontera sur, y le hemos explicado que son 6 mil hombres que van a estar ahí desplegados.
Ebrard informó que las pláticas continuarán hoy. A preguntas de versiones en medios de comunicación estadunidenses de que se está negociando algún tipo de acuerdo de tercer país seguro, respondió que la posición de México en contra de eso sigue igual, eso ya lo dije.