En un comunicado, la Clínica Mayo de Phoenix dijo que “el senador y su familia están estudiando posibles opciones de tratamiento con el equipo de esta clínica”. Esas opciones “incluyen una combinación de quimioterapia y radioterapia”. El médico de McCain “dice que se está recuperando de la cirugía ‘increíblemente bien’ y que su salud general es excelente”.
El tumor estaba relacionado con el coágulo en el ojo del que fue operado McCain. Los médicos extrajeron el tumor. Se trata de un glioblastoma, una forma agresiva de cáncer.
No es la primera vez que McCain se enfrenta a un cáncer. En el año 2000 fue intervenido para quitarle un melanoma, y de nuevo en 2002 por lo mismo.
La convalecencia repentina de McCain fue citada por el líder republiano en el Senado, Mitch McConell, para retrasar la semana pasada la votación sobre el plan para desmontar el sistema sanitario creado por el presidente Barack Obama. Con dos votos republicanos en contra asegurados, el de McCain era imprescindible. En la espera, otras dos deserciones republicanas terminaron por hundir el proyecto.No estaba claro el miércoles cuándo volverá McCain al Senado, o si llegará a reincorporarse, lo que dejaría a los republicanos con una mayoría de solo un voto a medio plazo.
El senador llamó a su colega de Arizona, el senador Jeff Flake, que tuiteó: “Acabo de hablar con McCain. Un diagnóstico duro. Pero un hombre aún más duro”.
La noticia provocó inmediatamente la reacción de solidaridad de otros miembros del Senado. El presidente, Donald Trump, publicó un comunicado en el que dice que su esposa y él envían sus mejores deseos “al senador McCain, Cindy y toda su familia”.
John McCain llegó al senado de Estados Unidos en 1986 para ocupar el escaño por Arizona del legendario Barry Goldwater, candidato a presidente en las elecciones 1964. Ha sido reelegido cinco veces, la última el año pasado, por un periodo de cinco años más. En 2008, fue él mismo candidato del Partido Republicano a la presidencia. Perdió las elecciones contra Barack Obama. Se le tiene por un moderado y uno de los vestigios de otra época en la que el Senado estaba menos dividido por la batalla partidista. Es presidente del Comité de las Fuerzas Armadas del Senado.
El expesidente Barack Obama también reaccionó en Twitter a la noticia: “John McCain es un héroe americano y uno de los luchadores más valientes que he conocido. El cáncer no sabe a lo que se enfrenta. Dale duro, John”.
Antes de su carrera de más de tres décadas en Washington, McCain fue piloto del Ejército de Estados Unidos. Fue abatido durante una misión sobre Vietnam en 1967. Pasó más de cinco años en cautiverio y sufrió torturas que le han dejado secuelas físicas de por vida evidentes en el rostro y en la postura de sus brazos.
En julio de 2015, al inicio de la campaña electoral, el entonces improbable candidato Donald Trump dijo en un acto en Iowa que McCain “no es un héroe de guerra porque fue capturado”. “Me gustan los que no fueron capturados”. El público soltó un suspiro de estupor y el comentario le valió la condena de todo el Partido Republicano. McCain había irritado a Trump al decir que el candidato estaba “calentando a los pirados” entre las bases republicanas. La antipatía entre ambos era indisimulable, aunque McCain acabó apoyando a Trump como candidato tras la nominación, en el verano de 2016.