En el Día Internacional de la Juventud hay una juventud oaxaqueña con muy pocas opciones de empleo, preocupada por el grave desempleo
José HANNAN ROBLES
Las intenciones de reflexionar y atender los desafíos mundiales que enfrentan los jóvenes como las altas tasas de desempleo, condiciones de trabajo vulnerable y marginación respecto a los procesos de adopción de decisiones, para lo cual fue establecido el Día Internacional de la Juventud, se ha quedado en eso: en buenas intenciones.
Energía, vigor y frescura caracterizan a la gente joven. Esta etapa se ubica entre la infancia y la edad adulta.
Los jóvenes generalmente dependen de sus familias y colaboran con ella.
Entre los 15 y 29 años, los jóvenes egresan de los centros de estudio para incorporarse a la actividad económica, se independizan de sus padres, inician su vida en pareja y su reproducción, caminando hacía la vida adulta.
El Día Internacional de la Juventud, encuentra a una juventud oaxaqueña con muy pocas opciones de empleo, preocupada por el desempleo por encima de temas sobresalientes como la inseguridad, pobreza, salud, educación, aumento de precios y corrupción.
De acuerdo a cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) en Oaxaca, la tasa de desocupación en los jóvenes durante el primer trimestre de 2014 fue de 4.6%, mayor a la tasa estimada a nivel estatal para la población de 15 años y más (3.4%).
Un análisis por edad pone de manifiesto que los adultos de 35 a 39 años (5.7%) y los jóvenes de 20 a 24 años (5.1%) tienen el mayor nivel desocupación.
Se estableció que uno de los problemas que enfrentan los jóvenes al buscar trabajo es la falta de experiencia laboral, 25.7 de los jóvenes desocupados no cuenta con esta experiencia.
Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT) un mayor número de jóvenes acepta trabajo temporal o empleo a tiempo parcial.
Los empleos seguros, dice, que en una época eran lo habitual para generaciones anteriores, por lo menos en las economías avanzadas, han pasado a ser más difíciles de conseguir para los jóvenes de hoy.
En Oaxaca, 13.5% de la población ocupada de 15 a 29 años dijo estar subocupada, es decir, tienen la necesidad y disponibilidad de ofertar más tiempo de trabajo de lo que su ocupación actual les permite.
Jóvenes con primaria son trabajadores informales en Oaxaca
La OIT identifica también un desajuste en las competencias laborales de los jóvenes y señala que la sobreeducación y el exceso de competencias coexisten en la subeducación y la escasez de competencias. Una forma de visualizar esta problemática en el país es analizar el trabajo informal: en el país el 61.7% de los jóvenes ocupados cumplen esta condición, y la proporción se eleva significativamente en los jóvenes de Oaxaca 85.6% y se hace más notoria cuando su escolaridad es baja 97.0% de los jóvenes ocupados con primaria incompleta y 97.8% con primaria completa son trabajadores informales.
Existe una importante proporción de jóvenes (67.5%) con estudios medio superior y superior que se ocupa de manera informal.
La Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública 2012 señala que en la entidad el tema que más preocupa a los jóvenes de 18 a 29 años, es el desempleo (44.8%), por encima de temas emergentes como la inseguridad (41.7%), pobreza (40.0%), salud (39.0%), educación (36.9%), aumento de precisos (28.1%) y corrupción (23.5%), entre otros.
De acuerdo a proyecciones del Consejo Nacional de Población (Conapo), a mediados de 2014 se calcula para la entidad 3 millones 986 mil 206 habitantes, con una proporcionalidad de 52.1% de población femenina y 47.9% de población masculina.
De la población total, una proporción del 26.6% corresponde a población joven de 15 a 29 años, equivalente a 1 millón 60 mil 191 habitantes.
Oaxaca experimenta fuertes rezagos, uno de ellos es el analfabetismo.
Según datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) indican que durante el primer trimestre de 2014, 2.0% de los jóvenes no tenían instrucción y 4.6% no completaron sus estudios de primaria, estos últimos, corren el grave riesgo de convertirse en analfabetas si no emplean en sus actividades cotidianas la lectoescritura.
La deserción escolar de los adolescentes a nivel medio superior es otro tema emergente, datos de la ENOE indican que 32.7% de los adolescentes de 15 a 19 años cuentan con al menos un grado aprobado el nivel medio superior, y de éstos, no todos asisten actualmente a la escuela, solo 78.6% cumplen con esta última condición.
En el país existe una multiplicidad de factores que explican esta problemática, pero la más preponderante, de acuerdo a la Encuesta Nacional de Deserción en la Educación Media Superior 2011, es la falta de dinero en el hogar para útiles, pasajes o inscripción, declarada así por 36.0% de quienes dejaron de estudiar a este nivel.
La segunda razón fue que ‘le disgustaba estudiar’ (7.8%) y la tercera ‘consideraba más importante trabajar que estudiar’ (7.2 por ciento)”.
