Israel ha comenzado a elaborar mapas de las partes de Cisjordania que pretende anexar en el marco del nuevo plan de paz presentado a finales de enero por el presidente de EE.UU., Donald Trump, según lo anunció el sábado el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.
«Estamos en medio del proceso de mapear el territorio que será parte de Israel de acuerdo con el plan de Trump», afirmó Netanyahu en un acto de campaña del partido Likud en el asentamiento de Ma’ale Adumim. El primer ministro precisó que el proceso «no tomará mucho tiempo» y se completaría «en unas pocas semanas».
Por su parte, Nabil Abu Rudeina, portavoz del presidente palestino, Mahmud Abbás, respondió advirtiendo que el «único» mapa que puede aceptarse es el del Estado palestino establecido según las fronteras de 1967, con Jerusalén como su capital. En este sentido, aseveró que los líderes palestinos ignorarán cualquier alteración del mapa internacionalmente reconocido.
«El mapa del Estado de Palestina es el mapa reconocido por el mundo en conformidad con las resoluciones de las Naciones Unidas, y es el único que puede lograr la seguridad, la paz y la estabilidad en la región y el mundo», enfatizó el vocero, agregando que «cualquier otro mapa significa la continuación de la ocupación [israelí] y no puede ser aceptado».