La explosión provocada la tarde del viernes en una toma clandestina en el ducto Tuxpan-Tula de Pemex, a la altura del municipio de Tlahuelilpan, en el Estado de Hidalgo tuvo lugar en plena batalla del Ejecutivo federal contra el robo de combustible, un negocio de gran escala en México en el que también ha penetrado el crimen organizado. Elementos de las fuerzas armadas intentaron persuadir a un grupo de pobladores que se bañaron en combustible mientras intentaban robar gasolina, pero no hicieron caso, luego sobrevino un fuerte estallido y el fuego empezó a consumir todo lo que estaba a su alrededor
Agencias
CIUDAD DE MÉXICO.– Al menos 67 muertos y más de 70 heridos dejó una explosión registrada el viernes en una toma ilegal de combustible en el municipio de Tlahuelilpan, en el Estado de Hidalgo (en el centro de México). La detonación ocurrió dos horas después del aviso de una fuga intencionada de gasolina. Los habitantes se habían desplazado al lugar con bidones para intentar llevarse algo del hidrocarburo. El Ejército llegó antes de la explosión, pero se replegó para «evitar un enfrentamiento con la población», según ha informado el Gobierno mexicano a través del equipo de comunicación de la Presidencia de la República.
El secretario de Salud en México Jorge Alcocer informó al medio día del sábado que uno de los heridos que atendían tras la explosión en Hidalgo ha fallecido, por lo que la cifra de muertos se elevó a 67. «Desde que empezó el evento 76 pacientes y de estos desafortunadamente ya hay una baja más, una pérdida de la vida de uno de ellos», declaró a los medios de comunicación.
El gobernador de Hidalgo, Omar Fayad, informó la mañana del sábado desde Palacio Nacional en la capital mexicana que son 66 los muertos del estallido del ducto en Tlahuelilpan, Hidalgo, y 76 heridos. Y hay gente debatiéndose entre la vida y la muerte. Calificó como “gran tragedia” lo sucedido. El presidente Andrés Manuel López Obrador expresó sus condolencias a las familias de las víctimas de la explosión; ofreció atención para los heridos y hablar con transparencia de los hechos.
El ducto que fue picado, dijeron, es muy importante. Los pobladores, señaló el Gobernador de Hidalgo, fueron alertados por las Fuerzas Armadas. “No hicieron caso”. Cuando sobrevino la explosión, agarró a la gente bañada en combustible. En eso mismo coincidieron los funcionarios federales y el mismo Presidente.
“La actitud, la acción del Ejército fue correcta y diría yo que oportuna. No es fácil ante una multitud hacer prevalecer el orden, aún explicando sobre los riesgos. Hay constancia de cómo se enfrenta a la población”, dijo el Jefe del Ejecutivo. “La gente llegó a estas prácticas [robo de combustible] porque no se les dieron opciones. Nunca se pensó en un plan para atender a la gente que ya estaba participando en estas actividades”.
“Estamos consternados por estos hechos por esta tragedia y queremos antes que nada ofrecer nuestro más sentido pésame a los familiares de la víctimas, informarles que todo el Gobierno está con ellos, que de manera sincera nos entristece lo sucedido”, dijo López Obrador en la conferencia de la mañana de sábado. “También transmitir a los familiares de los heridos que estamos dando atención especial en hospitales, que se está buscando salvar vidas, que eso es ahora lo más importante, el que no se presenten más decesos”.
Omar Fayad señaló que alrededor de las 16:50, el personal de Pemex informó de una perforación ilegal en un ducto, por lo que las Fuerzas Armadas acuden y después de las 17:00 horas llegan al sitio, el ducto que va de Tuxpan a Tula e intentan persuadir a las personas para que se retiren del lugar”.
“Por la presión del ducto, éste empieza a soltar hidrocarburo en grandes proporciones. Las Fuerzas Armadas pidieron que se retiraran del lugar. Sin embargo, no hicieron caso. Después de las 18:00 horas se nos informa de la explosión, que el fuego consumía todo lo que estaba a su alrededor. Inmediatamente después hice contacto con el Secretario Alfonso Durazo y con el mando de la Sedena para poner en marcha el Plan DNIII”.
“Estuvimos atendiendo este incidente en todos sus aspectos, haciendo un diagnóstico de qué es lo que había ocurrido. El saldo desafortunadamente es bastante triste para el estado de Hidalgo. El saldo que tenemos hasta unos minutos antes de entrar a esta reunión es de 66 personas fallecidas y 76 heridas. Se resguardó y aseguró el sitio para poder atender a los heridos y rescatar a los fallecidos. Se hicieron siete grupos de trabajo. Se definieron los centros de atención a los heridos”, dijo el Gobernador.
“Ante este lamentable suceso, la forma de respetar la memoria de las víctimas será con la verdad para que se dé a conocer oportunamente todo lo que se revele. La investigación estará a cargo de Petróleos Mexicanos, la Fiscalía General de la República y de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo”, dijo Fayad.
No al fuego contra fuego
“Nosotros no vamos a enfrentar el fuego con el fuego. No se puede enfrentar el mal con el mal. Eso no es solución. El mal hay que enfrentarlo haciendo el bien. Esto no es un asunto policiaco, militar, no se resuelve con medidas coercitivas, por eso se agravó la situación en el país. Nosotros vamos a seguir convenciendo, persuadiendo a la gente. Tenemos la convicción de que el pueblo es honesto y que si ha llegado a estas prácticas, es porque se le abandonó. Hay millones de pobres en el país, gente que ni siquiera tiene para lo indispensable”, dijo el Presidente.
“Desgraciadamente esto se repite en todo el país, por donde pasan los ductos. Es un problema grave. Se da en Veracruz, en Hidalgo, Puebla, el Estado de México, hasta cerca de la terminal de Azcapotzalco en la propia ciudad, lo que vimos hasta hace dos días en una bodega. Es general, la gente de los pueblos de México de toda la región petrolera y por donde pasan los ductos, sabe de lo que estamos hablando, por eso tengo información”, señaló el Presidente.
Octavio Romero, director de Petróleos Mexicanos, dijo: “Quisiéramos comentar con ustedes que cuando se detecta una baja de presión en un ducto, ya sea por una toma clandestina o por otra razón, se sigue un protocolo en el que se cierran las válvulas. El ducto estaba suspendido desde el 23 de diciembre y en proceso de empaque, es decir, hay que meterle producto al ducto. Esto se empezó desde el día 16 de enero y la operación se detuvo cuatro veces antes de los hechos del viernes. Este ducto surte 70 mil barriles diarios con una presión de 20 kilogramos. Cabe señalar que en el municipio de Tlahuelilpan se han llevado a cabo 10 tomas clandestinas”.
Luis Cresencio Sandoval, Secretario de la Defensa Nacional, agregó: “Recibimos el informe de parte del encargado de la vigilancia de los ductos, detecta la toma clandestina en el momento en el que todavía no salía mucho combustible. Poco a poco fue incrementando la salida de combustible hasta alcanzar 6 o 7 metros de altura. También se reúne una mayor cantidad de personas, entre 600 y 800″.
“Se busca evitar que las personas se acerquen al ducto, pero hacen caso omiso y se tornan, algunos de ellos, un tanto violentos. Y al verse rebasado por la cantidad de gente, [el personal] es obligado a retirarse a un costado, pendiente de lo que estaba sucediendo. Hay personas que se llenan de combustible en sus ropas. Al presentarse la explosión, el personal empieza a atender a los heridos y comienzan a arribar tropas para acordonar el área”, detalló.
“Todo nuestro personal va armado y al tener multitudes de esta naturaleza también siente algo de temor y evitamos la confrontación, que haya heridos con nuestras armas o que ellos agredan a los militares. Es muy difícil que 25 hombres controlen a 800 personas. Es mejor evitar la confrontación al verse rebasados en cantidad”, señaló el General Secretario.
Alejandro Gertz Manero, Fiscal General de la República, dijo que “este delito es un delito muy grave que tiene una penalidad de entre 20 y 30 años. Todo nuestro personal está realizando el peritaje para conocer quién o quiénes cometieron este delito”.
“Existen una serie de indicios, que son los videos, las actas periciales. Las personas que estaban más cerca de la explosión fallecieron. Entonces también tenemos una serie de limitaciones, pero eso no quiere decir que no podamos llenar el espectro. De que fue intencional, fue intencional. Alguien hizo la perforación para obtener combustible de manera ilegal. El incendio es otra cosa, pero derivado del primer delito”, dijo.
“Acerca de lo sucedido y lo que originó esta tragedia –dijo el Presidente de México–, como lo mencionó el Fiscal, se tiene que hacer la investigación, los peritajes, no adelantar nada porque esto corresponde a la Procuraduría de Hidalgo y de la República. Los informes de estos hechos van a estar a cargo de la PGR”.
“Duele mucho el que estas prácticas se hayan arraigado en los últimos tiempos en nuestro país porque las imágenes de la gente con cubetas, con bidones, recipientes para sacar gasolina o diesel son un asunto desgraciadamente que se extendió a toda la zona petrolera donde pasan ductos. Esto se puede constatar en lo sucedido en Tabasco, Veracruz, Puebla, Hidalgo, el Estado de México y otras entidades. Ya lleva tiempo, por eso la gente tiene estos recipientes y cada vez que hay una toma acuden a recoger combustible”, dijo López Obrador.
“Hace poco, el lunes 14 se dio a conocer en la reunión que tenemos sobre hechos en Acambay, parecidos en cuanto a la práctica. Hasta dijimos que para no estigmatizar a los pueblos, no lo íbamos a dar a conocer, pero se repite. Incluso se sabía que hasta se preparaban las condiciones para hacer acopio de los combustibles. Por esto, aunque duela mucho, tenemos que seguir con el plan de combate al robo de combustible. No van a detenernos. Van a erradicar esto que no sólo daña materialmente. No sólo es lo que pierde la nación, comercio ilegal, mercado negro, sino el riesgo, el peligro, la pérdida de vidas humanas”, señaló.
“Hemos pedido a la población que deje estas actividades y ahora que el Gobierno está atendiendo las demandas de la gente, pedimos que se inscriban. Es la misma imagen y se intenta detenerlos y es muy difícil”, dijo el Presidente. “Por eso el plan de llevar a cabo acciones de desarrollo tengo programado para martes y jueves visitas a estos pueblos. Se tenía esa gira programada por esto, para seguir llamando a la gente a que se abandonen estas prácticas y que no se apoye a los que distribuyen combustible en mayor cantidad también con las tomas clandestinas, que no se respalden”.
“De ahí también que ante la gravedad del problema de las tomas y el sabotaje para provocar desabasto, se haya decidido contratar conductores porque hay una comisión de Estados Unidos adquiriendo carros tanques con urgencia. Secretarios se trasladaron desde el jueves, tuvieron reuniones para tener entrega inmediata. La idea es que a partir del miércoles de la próxima semana estemos incrementando la transportación de gasolinas para no depender de todo de los ductos y poder tener un mejor control”, dijo López Obrador.
“Ayer se hablaba de que había habido un incremento en la producción de ductos, sí, pero gasoductos, pero no en el caso de gasolina y diesel. Esto hace que la capacidad de transportación por ductos sea limitada y al momento que hay fugas que nos saca de operación los ductos, hay desabasto”.