AUTORIDADES FEDERALES Y ESTATALES SE LAVAN LAS MANOS
Le asignaron un raquítico presupuesto, no cuentan con personal suficiente para atender las demandas
Legisladores exigen al gobernador Gabino Cué Monteagudo resolver la problemática y sentencian que el nosocomio no cerrará sus puertas
Jazmín GÓMEZ
Fotos: Jairo ARAGÓN
El Hospital de la Niñez Oaxaqueña, que hace más de 16 años trajo esperanza a miles de familias que tienen niños y niñas con enfermedades cancerígenas y mortales a la entidad, vive la peor crisis de su historia, los recursos que se le etiquetan son raquíticos y tanto el estado como la federación pretenden lavarse las manos. Algunos trabajadores denunciaron que había la intención de autoridades de cerrar dicho nosocomio por falta de recursos.
El área de quemados del nosocomio, desde su inauguración por el entonces presidente de la República Felipe Calderón Hinojosa, se encuentra sin funcionar, está a punto de caerse y el argumento es el mismo, no hay recursos en Oaxaca.
El Hospital de la Niñez Oaxaqueña “Dr. Guillermo Zárate Mijangos” se encuentra ubicado en inmediaciones del municipio de San Bartolo Coyotepec y fue instaurado a través del Patronato Pro-Hospital del Niño Oaxaqueño, A. C. creado el 26 de abril a iniciativa de un grupo de oaxaqueños encabezados por el Dr. Guillermo Zarate Mijangos.
Niños y niñas desde recién nacidos y hasta antes de los 18 años de edad son atendidos en el nosocomio, en promedio hay 250 consultas diarias, cuenta con 60 camas censables y 48 no censables, ofrece los servicios de salud en 12 especialidades médicas y 10 quirúrgicas
Este jueves 18 de junio, después de mes y medio de paro por parte de trabajadores de la sección 35 del Sindicato Nacional de Trabajadores de Salud reanudaron las labores de consulta en el hospital, luego del nombramiento de Isabel Dinora Díaz como directora general, quien sustituye al doctor Armando Altamirano Jiménez.
Se requiere voluntad de los gobernantes: Marlene Aldeco
La regidora de Salud del municipio de Oaxaca de Juárez, Marlene Aldeco Reyes Retana, afirmó que cuando existe voluntad de un gobernante las cosas se hacen, por lo cual exigió al Gobernador del estado, Gabino Cué Monteagudo tomar las medidas necesarias para evitar el cierre del Hospital de la Niñez Oaxaqueña.
En sesión de cabildo expresó que no se puede permitir el cierre de un hospital que brinda atención de calidad para niños y niñas de todo el estado, así se tengan que crear leyes o tomar las acciones que sean necesarias.
En entrevista, solicitó al Congreso local crear una Ley de Especialidad que incluya la atención al Hospital de la niñez Oaxaqueña para que cuente con recursos propios para poder funcionar y echar a andar el área de quemados que desde su inauguración sigue sin operar.
“Se puede hacer una ley pero si no hay voluntad de hacerse va a ser ley muerta, tienen que ponerse de acuerdo legisladores, Secretaría de Salud estatal, federal y Gobierno para que ese hospital no siga como hasta ahora”, precisó.
Explicó que un hospital en donde se atiende a las familias de comunidades más marginadas no debe desaparecer y será responsabilidad del Gobernador del Estado, de darse el caso, que por falta de recursos deje de operar.
Hay recursos pero son insuficientes: Henestroza
El legislador panista, Gerardo García Henestroza, afirmó que en el tema de salud antes que nada deben dejarse de lado los intereses personales o de sindicato, en particular cuando se ponen en riesgo vidas humanas.
Mencionó que el Hospital de la Niñez Oaxaqueña cuenta con un presupuesto raquítico que es de 20 millones de pesos anuales, así como de 43 millones de pesos en especie por parte del Seguro Popular e ingresos propios de 700 mil pesos, que son insuficientes para las enfermedades que ahí se atienden.
Apuntó que sin duda debe existir un aumento del presupuesto, pero como en todo organismo descentralizado quienes deben de decidir en cuestión de la administración del hospital deben tener en cuenta que son vidas humanas con las que se trabaja y no deben parar ante cualquier inconformidad.
El diputado externó que el Hospital de la Niñez depende directamente de la Secretaría de Salud, sin embargo, es necesario se hagan las gestiones correspondientes por parte de la Comisión Permanente de Salud de la LXII Legislatura local para que haya un incremento en el presupuesto que recibe.
Manifestó que se desconoce del cierre del hospital, de resultar verídica la información legisladores de Oaxaca tendrán que tomar las acciones necesarias para evitarlo porque sería un atentado a la vida de niños y niñas de Oaxaca, quienes provienen de familias de escasos recursos.
Federación tiene que asumir su responsabilidad
La diputada del PAN, Zonia López Cruz, consideró que la federación tiene que asumir su responsabilidad en el cuidado de la salud de toda la población mexicana, porque Oaxaca forma parte de un país que recibe recursos para operar.
“Tenemos que exigir a la federación que asigne los recursos necesarios para atender estos importantes centros hospitalarios, de donde viene el recurso es del Gobierno de la República y desde acá aunque quisiéramos etiquetar presupuesto si no lo hay, no habrá forma de atender”, argumentó.
“Se requiere dinero”, enfatizó la legisladora, no sólo voluntad de gobernantes que en sus discursos afirman continuamente que atienden las necesidades más prioritarias de la población pero por otra parte dejan morir a las familias de escasos recursos.
Explicó que se encuentra María de las Nieves García Fernández, oaxaqueña, como subsecretaría de salud y en ella debe mostrar voluntad de acción en el estado de Oaxaca porque por un lado están personajes como Juan Díaz Pimentel que desvían recursos en obras inconclusas, y por el otro gente muriéndose de hambre o por falta de atención médica.
No cerrará Hospital de la Niñez: SSO
Héctor González Hernández, encargado del despacho de los Servicios de Salud en Oaxaca, afirmó que el Hospital de la Niñez Oaxaqueña no cerrará sus puertas, se tienen que buscar medidas distintas a esa.
“Se especula mucho de que va a cerrar, pero no se puede cerrar. Lo que tenemos que hacer es definir en donde se queda porque es una institución pública descentralizada en la que el Gobierno del Estado ayuda a través de los Servicios de Salud, se tiene que definir si sería mejor que se convirtiera en organismo centralizado del gobierno federal”, afirmó.
Dijo que se atienden las demandas que tienen que ver con abasto de medicamentos, infraestructura y más personal, sólo quedaría pendiente bajo qué condiciones quedaría para que no deje de operar.
Cáncer, el asesino que gana terreno
Marco Antonio y Saúl López, de 17 años de edad, dos casos de “esperanza”
Marco Antonio González y Saúl López, de sólo 17 años de edad, son dos de los cientos de casos que son atendidos en el Hospital de la Niñez Oaxaqueña, a sus madres las mantiene fuertes la esperanza de que el tratamiento y los cuidados que reciben en el nosocomio puedan salvarles la vida.
Marco Antonio presenta tumor en el corazón, Saúl en el cuello. Ambos ingresaron hace 6 meses al hospital, el segundo de ellos puede hablar, están en cama y reciben la atención de especialistas en la materia. Sus familias son campesinas, sus madres amas de casa.
“Dios es mi esperanza”: Dominga
Dominga Hernández, madre de Marco Antonio y originaria de la comunidad de Guadalupe Victoria en San Carlos Yautepec, ubicada a 9 horas de la capital, afirma que Dios es su esperanza porque tiene que ser fuerte para que su hijo no pierda fuerzas y luche por su vida.
Explicó que en el Hospital de Salina Cruz en donde revisaron en un primer momento a su hijo no pudieron detectarle la enfermedad que padecía, en el de la Niñez, con estudios y el apoyo de especialistas le dijeron que se trataba de un tumor en el corazón lo que días antes ocasionó que los pies se le entumieran y no pudiera caminar.
Dominga no puede explicarse cómo llegó a esa situación, Marco era un niño como cualquiera, estudioso, asistía al segundo año de preparatoria, y de pronto le informaron, el 22 de diciembre, que se le entumieron los pies y desde ese entonces no pudo caminar más. “Del corazón le extrajeron cinco kilos de tumor”.
Mencionó que su esposo es campesino, ella ama de casa, ambos cuidan de Marco desde su ingreso al hospital, “hay que cambiarlo, bañarlo y hacer guardia en su cama”, el doctor ya advirtió que no volverá a caminar.
“Siempre le doy ánimos a mi hijo, le digo que Dios es tan grande que volverá a caminar. Gracias al mismo Dios aquí los atienden bien, en la casa no sabríamos qué hacer con él, recibe sus medicamentos, quimioterapias cada ocho días”, mencionó.
Explicó que en el albergue tienen dos comidas de forma gratuita, gracias al apoyo del mismo hospital, su esposo y ella no sabrían cómo solventar sus gastos si tuvieran que comer en otro lugar, tienen dos hijos más de 8 y 5 años de edad, su abuela los cuida en la comunidad.
“Me duele ver a mi hijo en cama, pero debo tener fuerzas para él”: Victoria
Victoria Aparicio García, madre de Saúl López es originaria de San Juan Teponaxtla, del municipio de Putla Villa de Guerrero, quien expuso que su hijo dos años antes de que le detectaran que tenía tumor en el cuello presentaba dolores, pero nunca quiso que lo llevaran al médico para que sus padres “no gastaran”
“Él tenía dolor en el cuello cada dos o tres meses, pero no quería que gastara dinero con él porque sabe que no tengo, pero yo le dije que lo teníamos que llevar al médico, fue hasta que no pudo más agarrar su lápiz en el tercer semestre de Telecobao que lo llevé a un hospital”, refirió.
Doña Viky comentó que en Tecomaxtlahuaca se dedican a la siembra de maíz, frijol y café, de este último obtienen el sustento de todo un año, así como del ingreso de su esposo quien trabaja en Estados Unidos desde hace 3 años.
Mencionó que tuvo dos hijos y dos hijas, una de 36 años, otro de 29, otra más de 24 y el más pequeño de 17 años de edad es Saúl, quien desde pequeño es tímido, reservado, le gusta jugar voleibol.
Explicó que su esposo le manda mil pesos para sus gastos mensuales, recurso con el que se mantiene mientras está en el hospital, su gran apoyo con las comidas que le ofrecen en el albergue en el hospital.
Respecto a su hijo, apuntó que le duele verlo en su cama, no puede hablar pero debo tener fuerzas para él, y afuera del cuarto, donde no me ve, no puedo contenerme las lágrimas, está entubado, lo único que puedo hacer es decirle que le ponga ganas.
Doña Viky de 55 años de edad, es católica, sus fuerzas las toma del amor que le tiene a Saúl, a quien preferiría verlo cometiendo uno y mil errores en su vida antes de tenerlo en esa cama, pero considera que su tristeza no le dará valor a su hijo.
CUALQUIER APOYO A LAS MADRES DE LOS JÓVENES ENFERMOS DE CÁNCER LLAMAR A: DOMINGA HERNÁNDEZ, MADRE DE MARCO ANTONIO 9515451218/ VICTORIA APARICIO, MADRE DE SAÚL LÓPEZ 9511777844
