Además de rescatar a la constructora ICA, el Fondo Nacional de Pensiones de los Trabajadores al Servicio del Estado (Pensionissste), en los tiempos en que era manejado por José María de la Torre Verea, financió a las empresas RLH Properties y Planigrupo, de las cuales el funcionario fue accionista.
De la mano del entonces secretario de Hacienda, Luis Videgaray Caso, el entonces vocal ejecutivo fue nombrado titular del Pensionissste en marzo de 2013. Desde entonces se documentaron irregularidades mediante denuncias administrativas y recomendaciones de la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
Antes de abandonar la vocalía ejecutiva del Pensionissste, De la Torre Verea se vio involucrado en un escándalo –al ser denunciado por otorgar ventajas a empresas participantes en procesos de adjudicación–, pues mediante licitaciones públicas se autorizaron contratos por 700 millones de pesos a postulantes en el concurso de modernización comercial de la Afore.
Los contratos se asignaron a las empresas Cos Campestre y Human Capital Management. Tras esa determinación, avalada por el órgano administrador del Pensionissste –en el que participan representaciones del gobierno, del sindicato y social– a iniciativa del vocal ejecutivo, el órgano interno de control del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) recibió impugnaciones al procedimiento de asignación de los contratos, promovidas por las firmas Negocios Universal TD2, SCOI Soluciones Corporativas Integrales y Sitah Soluciones Integrales con Talento Humano.
Los promoventes de esas denuncias imputaron responsabilidad a De la Torre Verea; Mauricio Delgadillo Martínez, subdirector comercial, y José Alfredo Santis Rohan, jefe del departamento de análisis de la dependencia, porque beneficiaron a algunos participantes.
Esa fue la última acción irregular en la que intervino el entonces vocal ejecutivo. Su sucesor, Rodolfo Campos, heredó un conflicto mercantil del que se han desprendido cinco recursos judiciales, pues la Afore reclama mayor recuperación del convenio de acreedores con ICA, porque el argumento principal es que la constructora no fue transparente en la información financiera que proporcionaba.
Y es que el valor de capitalización de ICA se hundió hasta 80 por ciento en 2015. Ya había incumplido el pago de intereses de la deuda que no saldaba y se ubicaba en un escenario inminente de bancarrota.
Tal circunstancia fue irrelevante para De la Torre Verea y el comité de inversiones conformado por Gonzalo García Cardiell, subdirector de finanzas y administración; Leonardo Díaz Barreiro Lozano, subdirector de inversiones; Juan Francisco Díaz Aguirre, consejero independiente; Francisco Javier Cárdenas Rioseco, consejero técnico propuesto por la Secretaría de Hacienda, y Mauricio Jorley Muñoz de Cote Zendejas, consejero técnico propuesto por el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación.
Con ese caudal de anomalías, De la Torre Verea dejó el cargo de vocal ejecutivo del organismo en abril de 2017 y de ahí se incorporó a la desarrolladora Planigrupo, que obtuvo financiamiento con recursos de los trabajadores, precisamente durante el paso de este funcionario al frente del Pensionissste.
Es más, a propuesta de De la Torre Verea el Pensionissste invirtió en Planigrupo más recursos que en ICA, por un monto de 570 millones de pesos, impulsando con ello el éxito de esa inmobiliaria en la Bolsa Mexicana de Valores a partir de 2016.
Después se reveló en los medios de comunicación que en enero de 2016 De la Torre Verea fue nombrado miembro propietario no independiente de RLH Properties, otra empresa en la que el órgano público desconcentrado del Issste posee acciones.