Agencias.- Las tensiones entre Arabia Saudita e Irán siguen en aumento y han orillado a las naciones de Medio Oriente a alinearse, mientras otras potencias mundiales se pronuncian sobre el conflicto, luego de que este fin de semana un clérigo chiita fuera ejecutado por Riad.
El sábado, 47 personas fueron ejecutados luego de ser imputados por actividades terroristas. Entre ellos se encontraba el clérigo Nimr al Nimr, cuya muerte exaltó los ánimos de Irán, país de mayoría chiita y desencadenó fuertes protestas en Teherán, que culminaron con el ataque a la embajada saudí.
Al-Nimr fue condenado a muerte por incitar a la lucha sectaria, sedición y otros cargos. El religioso había hablado en repetidas ocasiones en contra del gobierno y la familia real saudita.
Arabia Saudita anunció el domingo la ruptura de lazos diplomáticos con Teherán, en represalia por el ataque. A partir de entonces, otros de sus aliados regionales también han enfriado relaciones con el país.
Bahrein y Sudán cortan lazos con los iraníes
Bahrein anunció este lunes la ruptura de sus lazos diplomáticos con Irán, citando su «descarada y peligrosa» interferencia en el país y en otras naciones árabes, según un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores.
El personal diplomático iraní tiene 48 horas para abandonar Bahrein. El embajador iraní ya había sido expulsado del país en octubre, después de que Bahrein acusó a Irán de interferir en asuntos internos y de armar a militantes contrarios al gobierno.
Sudán, un país africano de mayoría sunita, expulsó este lunes al embajador de Teherán junto con todo su cuerpo diplomático y pidió a su embajador en Irán volver a África.
El gobierno saudita anunció el movimiento sudanés como una medida contra «la intervención iraní en la región a través de un acercamiento sectario».
EAU reduce a su cuerpo diplomático en Irán
Emiratos Árabes Unidos anunció este lunes que reducirá sus relaciones diplomáticas con Teherán debido a la intervención del país en los «asuntos árabes», por lo que convocará nuevamente a su embajador y reducirá el número de enviados que tiene en Teherán, según la agencia estatal WAM.
EAU «ha tomado este paso excepcional a la luz de la continua interferencia de Irán en el Consejo de Cooperación para los EStados Árabes del Golfo y a la intromisión, que ha alcanzado niveles sin precedentes, en los asuntos árabes», indicó el gobierno en un comunicado.
Otros países piden «calmar los ánimos»
Las dos principales potencias de la región, Rusia y China, hicieron un llamado este lunes a reducir las tensiones entre Arabia Saudita e Irán.
«Moscú está preocupado por la escalada de la situación en Medio Oriente con la participación de dos jugadores clave», dijo el ministro del Exterior este lunes. Rusia llamó a ambos países a «contenerse y evitar cualquier incremento en las tensiones, incluyendo las interreligiosas».
En tanto, el primer ministro chino aseguró que está pendiente del desarrollo de los eventos y que espera «que todas las partes puedan mantenerse calmadas, usar el diálogo y las negociaciones para resolver las diferencias apropiadamente, y trabajar juntos para salvaguardar la paz y la estabilidad en la región».
Estados Unidos, quien es aliado de los sauditas pero ha tenido acercamientos con Irán últimamente, instó a los gobiernos de ambas naciones a tomar «medidas positivas para calmar las tensiones». Francia y Alemania también solicitaron a las naciones de Medio Oriente calmar sus tensiones.
Arabia Saudita e Irán ya son acérrimos rivales. Y los conflictos regionales actuales tienen animosidad entre ellos.
En Yemen, Arabia Saudita está luchando contra los rebeldes houthi, aliados de Irán. Y en Siria, Arabia Saudita aboga por el derrocamiento del presidente Bashar al Assad, quien es un aliado de Teherán.