Agencias.-La Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) recortó en tres décimas su previsión de crecimiento mundial para este año a 3%, alertando sobre la desaceleración de países emergentes, la caída de la demanda y un alto riesgo de inestabilidad financiera.
“Los riesgos de inestabilidad financiera son sustanciales», advirtió el organismo, que urgió a una respuesta colectiva para dinamizar la economía del planeta.
Se trata de la principal conclusión que se desprende de la revisión intermedia del informe semestral de Perspectivas de la organización.
La OCDE, una entidad de 34 países, en su gran mayoría del mundo desarrollado, ya había recortado en noviembre en tres décimas —a 3.3%— su previsión sobre el crecimiento del Producto Interno Bruto mundial en 2016.
Con el nuevo recorte a 3%, la expansión de la economía mundial debería ser este año la misma que en 2015, año que ya registró el ritmo más lento en los últimos cinco años, según Reuters.
La organización, con sede en París, también recortó tres décimas —de 3.6% a 3.3%— su proyección para 2017.
Pero si las preocupaciones de noviembre se centraban en el estancamiento del comercio mundial provocado por la desaceleración de China, actualmente abarcan al conjunto del planeta y cuestionan las respuestas ideadas hasta el momento para dinamizar a la economía.
“Se necesita una respuesta política colectiva más vigorosa para fortalecer la demanda”, proclamó el informe, que apunta a las políticas fiscales «de contracción» de muchas economías avanzadas y al menor ritmo de las reformas estructurales.
“La política monetaria no puede actuar sola. Se necesita de una política más fuerte y colectiva para fortalecer la demanda”, sostuvo y llamó a los países con espacio para la expansión fiscal a elevar la inversión pública en proyectos de infraestructura.
¿Quiénes sufrieron las mayores rebajas?
La OCDE no desglosó el conjunto de perspectivas para sus 34 Estados miembros, sino que se limitó a esbozar las tendencias en sus mayores economías.
Estados Unidos y Alemania tuvieron los mayores descensos de las previsiones entre las grandes economías desarrolladas, con un recorte de medio punto porcentual para ambos países, a 2% y y 1.3%, respectivamente.
La OCDE identificó riesgos mayores en países emergentes como Brasil, Rusia y Turquía, vulnerables a «choques cambiarios» por sus deudas ampliamente denominadas en dólares.
Entre las mayores economías emergentes, Brasil fue considerada como una de las principales víctimas de la caída de los precios de las materias primas y el organismo previó que su economía se contraiga 4% este año, más de lo estimado previamente.
La entidad estimó que la zona del euro crezca 1.4% este año y 1.7% en 2017, mientras que la economía estadounidense aceleraría su ritmo de expansión a 2.2% el próximo año.
La OCDE mantuvo sin cambios sus pronósticos para el crecimiento de China en los dos años próximos, pero aún prevé que se desacelere a 6.5% en 2016 y a 6.2% en 2017.
En tanto, el centro de estudios elevó su pronóstico para el crecimiento de India en 2016 en 0.1 punto porcentual, a 7.4%.