A pesar de que estuvo al frente de los destinos del estado en dos lapsos muy cortos de tiempo el jurista donó a los oaxaqueños la ex hacienda de Aguilera donde actualmente se encuentran la Facultad de Medicina, otras instituciones educativas y el Hospital Civil; su mayor error, que le costó el cargo, haber reconocido al usurpador Victoriano Huerta
Carlos CERVANTES
El licenciado Miguel Bolaños Cacho fue gobernador del estado en dos periodos cortos, como interino, del 6 de junio al 1 de diciembre de 1902 y luego del 19 de agosto de 1912 al 13 de julio de 1914. Le tocó enfrentar los levantamientos armados de la Sierra Juárez, una verdadera guerrilla y no como en nuestros días en que los guerrilleros de banqueta perjudican no solo a la sociedad en general, sino que asesinan a la educación de manera impune. El Gobernador dejó a la ciudad de Oaxaca parte de lo que fue la hacienda de Aguilera inmueble donado al gobierno del estado que incluía el hermoso frontispicio neoclásico y los terrenos.
Los diputados asumieron su papel
En el segundo periodo de gobierno Bolaños Cacho ganó la elección por decisión, podría decirse, ya que los comicios fueron celebrados en el mes de junio de 1912 participando como candidatos el Lic. Arnulfo San Germán, el doctor Aurelio Valdivieso, el Lic. Juan Sánchez y el Lic. Bolaños Cacho. Como ninguno de los contendientes logro mayoría absoluta, la Legislatura Local tuvo que decidir y se inclinó por el licenciado Miguel Bolaños Cacho.
El nuevo gobernador fue egresado del Instituto de Ciencias y Artes del Estado aun cuando posteriormente continuó estudios de jurisprudencia en el renombrado centro de enseñanza profesional de Puebla “El Colegio del Estado” donde se tituló como abogado, a los escasos veinte años de edad. Inmediatamente inició su brillante carrera en el servicio público en diversos puntos del país. En 1905 asumió el cargo de ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el cual desempeñó con honradez al igual que las anteriores encomiendas. Fue diputado federal y senador.
El clima político no
permitió mas obras
Dentro de los trabajos desarrollados como gobernador se cuentan la vigorosa campaña de vacunación “antivariolosa” en toda la entidad; mejoras en el hospital general que era el único que existía en la ciudad de Oaxaca; terminación de la escuela Porfirio Díaz edificada en el predio donde estuvo el “mesón de la Soledad” en la calle que hoy se conoce como avenida Independencia y que fue propiedad de la familia de don Porfirio Díaz, quien donó el espacio cuando llegó a la Presidencia de la República; además la colocación de mosaicos en los corredores de Palacio de Gobierno.
Cuando Bolaños Cacho asumió la gubernatura en 1912 Oaxaca se encontraba en la encrucijada de la agitación política mientras que la división entre los revolucionarios se acentuaba notoriamente. Tal vez por ello al rendir protesta dijo: “Gobernaré sin temores ni rencores llamando a todos los hombres de bien capaces de colaborar al progreso del estado y cualquiera que sea su credo político o religioso pues para afianzar la paz y la tranquilidad púbica perturbadas, se necesita fomentar la unión entre todos los elementos de la sociedad. ¡Haré levantar y respetar, sin omitir medio alguno por penoso que sea, el principio de autoridad!
Balandronadas de los serranos
Sin embargo, los rebeldes serranos que pretendían separar a Oaxaca del sistema federal y lograr la soberanía de la entidad, recibieron con inconformidad el nombramiento de Bolaños Cacho, por considerarlo hechura de don Porfirio, y a unas semanas de asumir el cargo, los ixtepejanos, destrozaron la fábrica de hilados y tejidos instalada en Xía, pero además pensaban tomar la ciudad de Oaxaca sin lograrlo por falta de organización a pesar de contar con cinco mil hombres. Sin embargo, en esos jaloneos otro grupo de armados saqueó la Villa de Etla. Los combates, escaramuzas y saqueos continuaron por un buen tiempo por parte de los serranos hasta 1913 cuando fue tomada la Ciudadela en la ciudad de México y cambió la situación política nacional.
Notables oaxaqueños, asesinados
La situación de Bolaños Cacho se debilitó al saberse que había reconocido al usurpador Victoriano Huerta, mientras que en la mayor parte del país don Venustiano Carranza lograba miles de adeptos para combatir al usurpador. Sin embargo, la persecución de los carrancistas por parte de Victoriano, se acentúo en todo el país. En Oaxaca fue condenado el hecho de que agentes huertistas asesinaran a un gran número de liberales entre ellos el diputado y periodista Adolfo C. Gurrión, el también diputado Faustino G. Olivera y el director del diario “El Bien Público”, Ismael Puga y Colmenares.
El hecho de que el gobernador de Oaxaca se hubiera aliado con el usurpador Huerta fue el último error político que le permitió el pueblo de Oaxaca y la mañana del 12 de julio de 1914 como dice el corrido “nomás blanqueaban los cerros de puros encalzonados”. Eran indígenas armados de la Sierra Juárez encabezados por Guillermo Meixueiro, Onofre Jiménez, Isaac M. Ibarra y otros cabecillas quienes desconocieron al gobernador Bolaños Cacho. El día 13 del mismo mes en San Felipe del Agua hubo una reunión entre el Gobernador y los cabecillas serranos, acordando la renuncia del Ejecutivo estatal y salida de la entidad, como efectivamente sucedió y el gobernador se exilió en San Diego California donde falleció el 19 de mayo de 1928 a los 77 años de edad. Pocos años después esos cabecillas fueron gobernadores del estado, sucesivamente.
El edificio neoclásico de Aguilera
Sin embargo, Bolaños Cacho logró construir el edificio para el Monte de Piedad y la mansión de Aguilera en el predio de su propiedad que posteriormente lo donó al gobierno del estado y desde entonces forma parte importante de la fisonomía de la ciudad de Oaxaca. Otros gobernantes posteriores en vez de donar algo de su propiedad a Oaxaca, se llevan todo lo que pueden.
Parte de los terrenos de la ex hacienda de Aguilera años después fueron dedicados al vivero de la ciudad, pero con posterioridad el gobierno estatal los donó para construcción de varias escuelas. El gobernador Rodolfo Brena Torres donó a la Universidad “Benito Juárez” de Oaxaca las construcciones que incluían el frontispicio neoclásico para que fuera sede de la Escuela de Medicina. El predio donde se construyó el actual Hospital General fue parte de la ex hacienda.
Don Miguel Bolaños Cacho independientemente de su actividad política, fue un personaje culto, escritor y poeta. A su paso por el Instituto de Ciencias y Artes del Estado publicó dos hojas periódicas; “La Voz de la Juventud” y “La Palabra”. En 1900 a los 31 años de edad, en Chihuahua escribió “El Poema del Siglo”, en donde se mostró patriótico, amante de la vida y el progreso de la humanidad.