Agencias.-Tenue, la silueta de Kukulcán apenas se dibujó sobre las escaleras de El Castillo de Chichén Itzá, a pesar de la ilusión de miles de turistas nacionales y extranjeros que llegaron ayer desde temprana hora a la zona arqueológica para apreciar el fenómeno arqueoastronómico de su descenso.
Datos del Patronato Cultur indican que del viernes hasta ayer, más de 37 mil personas acudieron a Chichén Itzá, con la esperanza de observar los rayos del Sol proyectarse sobre la esquina de la pirámide y crear sombras “triangulares” que forman el cuerpo de la Serpiente Emplumada de arriba hacia abajo, hasta “conectar” con la cabeza.
No obstante, el clima que predominó el fin de semana en la Península de Yucatán ocasionó nublados desde el viernes y no permitió observar en todo su esplendor el fenómeno arqueoastronómico, generando desilusión entre los miles de turistas.
Durante algunos momentos de ayer, después de las cuatro de la tarde, el Sol comenzó a emerger entre las nubes, lo que motivó a los presentes aplaudir, como queriendo motivar al Astro Rey a hacerse presente, pero sólo lo logró por algunos minutos.
Esto ocasionó que la mayoría de las 16 mil 625 personas que acudieron a Chichén Itzá optaran por retirarse, pues el cielo seguía cubierto de amplia y gruesa capa de nubes.
¿Qué es lo que se ve?, ¿cuándo va aparecer?, ¿en qué parte del Castillo?, eran algunas de las preguntas que hacían los visitantes, principalmente los extranjeros, a los guías de turistas.
A falta de que se diera el espectáculo, los guías de turistas procedían a explicarles en qué consistía el fenómeno arqueoastronómico y sacaban fotografías de equinoccios anteriores, en el que se veía a Kukulcán en todo su esplendor.
“Venimos de Argentina, estábamos en Cancún y nos enteramos de esto, nos animamos a venir, pero no se no dio ver este espectáculo”, señalaron Milagros y Angela.
No faltaron los turistas vestidos de blanco que se tiraban al pasto y con brazos extendidos tratando de “cargar buena energía”.
De todo el fin de semana, el sábado se apreció mejor el equinoccio y ayer fue el peor.
Aunque ayer no hubo amenaza de lluvia, todo el tiempo permaneció nublado. m
Kin ‘se escapa’ de la mirada de turistas en Dzibilchaltún
En un ambiente cultural, deportivo y místico, más de dos mil 500 personas dieron la bienvenida a la primavera en la zona arqueológica de Dzibilchaltún, y aunque el fenómeno de luz y sombra no se pudo observar a plenitud por las condiciones climáticas, esto no impidió que pudieran apreciar la grandeza de la cultura maya.
Los turistas nacionales y extranjeros se dieron cita en el recinto para apreciar el paso de Kin (dios del Sol en maya) por la puerta del Templo de las Siete Muñecas, lo cual no se pudo apreciar. No obstante, los visitantes convieron en la primera Carrera del Equinoccio y la Magna Vaquería Dzibilchaltún 2016, en las que prevaleció el orden, la calma y el ambiente de fiesta regional.
El titular del Patronato de las Unidades de Servicios Culturales y Turísticos del Estado (Cultur), Dafne López Martínez, afirmó que estos eventos se realizaron con el objetivo de promover el deporte y las tradiciones en un sano ambiente familiar, en el marco del inicio de la primavera.
El funcionario indicó que en la organización se contó con la participación y apoyo de diversas dependencias federales y estatales, que comparten el objetivo de impulsar la afluencia de más visitantes a la entidad.
En la Carrera del Equinoccio, a la cual se sumó López Martínez, participaron mil 800 personas, quienes a las 7 horas salieron del parador turístico de la zona para dirigirse a la cabecera de la comisaría.
El primero en cruzar la meta fue Irving Villafaña, con tiempo de 16:03 minutos, seguido de Dino Castro, con 17:44 minutos, y José Palma, con 18:04 minutos.
En femenil, Jéssica López ocupó la primera posición al cronometrar 20:15 minutos; Gabriela Hernández, el segundo lugar, con 21:05 minutos, y Sandra Padilla, el tercero, con 21:58 minutos.
