Mezcal ó Komil
Un grupo de 500 productores del mezcal por la vía tradicional, afirmaron que desaprueban el proyecto de la Norma Oficial Mexicana PROY-NOM-199-SCFI-2015, por el cual pretenden llamar Komil al mezcal que no tenga Denominación de Origen (DO), que sin duda afectaría también en Oaxaca.
La maestra mezcalera, Sósima Olivera Aguilar, de la región Chontal Alta del distrito de Yautepec, afirmó que aun cuando la propuesta es que se denomine así al destilado que se realiza en estados que no cuentan con la denominación de origen de los cuales escapa Oaxaca, los productores que hacen el destilado por la vía tradicional también se verían afectados.
Señaló que la norma, publicada en febrero de este año, incurre en varias irregularidades, una de ellas es que jamás se preguntó o consultó a las comunidades en donde se produce el mezcal de llamar Komil a su bebida tradicional.
“A muchos nos dicen que quienes no estemos dentro de la denominación de origen o no contemos con ciertos requisitos burocráticos tendremos que llamarlo también Komil. Nos indigna y consideramos que se trata es un despojo porque nadie de nuestros productores sabe de dónde proviene la palabra ni lo que significa”, dijo.
Abundó que técnicamente saben que Komil se le dice a las bebidas alcohólicas, otra cuestión con la que no están de acuerdo o no comparten la idea, toda vez que el mezcal no es sólo una bebida alcohólica, sino que es una bebida espiritual, que representa tradicionalidad en los pueblos, una bebida que acompaña en la vida y en la muerte de las comunidades,
“Sabemos que actualmente hay un proceso de consulta, pero se está haciendo por medios electrónicos a los que ninguna de nuestras comunidades tiene acceso, se trata de un engaño de quienes impulsan la norma que es principalmente el Consejo Federal de Mejora Regulatoria (COFEMER) que está aprovechando el importante auge que tiene el mezcal”, dijo Olivera Aguilar.
Señaló que un promedio de 900 productores de mezcal se verían afectados con la norma que impulsan la COFEMER y la Secretaría de Economía Federal, de los cuales 500 han comenzado una batalla en Oaxaca para oponerse con los medios que sean necesarios para que se aplique esa norma.
Insistió en que cuando el mezcal no había cobrado importancia comercial como en la actualidad no se habían dado problemas, sin embargo el auge que ha cobrado en últimos años ha movido intereses económicos que se ven reflejados con la nueva norma que se pretende impulsar.
“Se han dado cuenta de que el mezcal es una de las bebidas más finas del mundo, que la gente lo está pidiendo y al haber tanta demanda es una urgencia de las empresas posicionarse y bloquear a productores tradicionales, para de esta manera obtener ellos todas las ganancias”, refirió la maestra mezcalera.
El mezcal tiene profundidad y vida, dice abogada
Josefina Vásquez Morales, asesora legal de maestros y maestras mezcaleras, dijo que el proyecto de la COFEMER se está haciendo sin consulta previa a los pueblos indígenas, lo que violenta sus garantías constitucionales e indígenas como lo es el convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo en su artículo sexto, que refiere que para crear una norma legislativa tiene que haber consulta previa, libre e informada.
“El mezcal tiene profundidad, tiene vida, en nuestra entidad el mezcal nos acompaña en la vida y en la muerte, significa tradición, cultura y costumbres, desafortunadamente los legisladores se conducen por intereses personales y mezquinos”; dijo.
Detalló que Komil no tiene ni tendrá jamás la esencia de la palabra mezcal, ante ello productores estarán en contra de la norma que antes que nada deberá ser conocida a detalle por las comunidades productoras del mezcal.
Nuestra bebida es tradicional y medicinal: productor
Natalio Vásquez Ríos, productor de mezcal y agave de la comunidad de “El Palmar”, municipio de San Luis Amatlán, distrito de Miahuatlán, dijo que la producción del mezcal es algo que aprendió de su papá, quien a su vez aprendió de su abuelo y de su tatarabuelo, algo heredado por generaciones.
Abundó que lleva 15 años produciendo la bebida, cerca de 8 mil litros que produce principalmente en los meses de marzo, abril y mayo, pues en temporada de lluvias es más difícil la producción de este destilado por la vía tradicional.
Indicó que llamarle Komil a esta bebida también considerada “medicinal” afectaría en su tradición, en su cultura y en sus tradiciones, es por ello la importancia de encabezar una lucha en contra de la norma que se pretende implementar.
“Para nosotros es una bebida a la que llamamos mezcal medicinal porque con él se curan todas las enfermedades, eso se dice en nuestra comunidad, pues es bueno para quitar dolores musculares, para quitar el hambre, el calor o el frío, además es cien por ciento orgánico y no lleva fertilizante”, dijo.
Apoyaré la lucha de los mezcaleros: Carlos Borboa
Carlos Borboa Suárez, periodista y uno de los catadores en el concurso internacional de espiritosos, dijo que no es posible tener un país en el que se estén perdiendo las tradiciones o la gastronomía, tradición o cultura sólo porque un grupo de personas así lo quiere.
Señaló que cambiar el nombre de mezcal o komil no debe ser sólo un capricho de sexenio, de legisladores o de empresas, se trata de un producto de mucha tradición, que se produce en diversos estados del país y que estaría afectando principalmente al Estado de Oaxaca, a productores que lo hacen por la vía tradicional.
“No sé a quién beneficia, pero siempre hay o habrá intereses de muchos tipos, comerciales, políticos, como un gran defensor del mezcal no estoy de acuerdo y no me parece que no se beneficie a los productores reales, pero entraríamos en polémica de quién soy yo para decirlo”, dijo.
Mencionó que por su parte, siempre defenderá la tradición, que sean los productores los que siempre se beneficien sin importar si algún grupo o empresa invierte millones de dólares en promocionar una marca, son los productores, quienes llevan miles de años en tradición los que se deben de beneficiar ante cualquier cambio en la legislación.
Es claro, abundó, que hay muchas personas que producen el mezcal de forma tradicional, que la norma no beneficia a todos y que es importante que la sociedad sea analítica ante cualquier cambio que se pretende imponer desde los grupos de poder.
“Es necesario que la sociedad sea participativa, que se entere de lo que está ocurriendo a su alrededor, las y los mexicanos estamos obligados a mantenernos siempre informados, defender nuestras riquezas como es en este caso, la tradicionalidad del mezcal”, puntualizó.
