Por EL CALLA´O
El caso de la joven saxofonista María Elena Ríos Ortiz, atacada con ácido en cara y cuerpo el pasado 9 de septiembre, en Huajuapan de León, ha tomado un viraje inesperado, pues siendo un asunto exclusivo de los órganos jurisdiccionales, la semana que terminó, el gobernador Alejandro Murat intervino para solicitar al ex diputado priista, Juan Antonio Vera Carrizal, presentarse a declarar, “pues el silencio otorga” –dijo-. Lo extraño es que a través de los medios legales y de impartición de justicia, el aludido empresario no haya sido obligado a presentarse a declarar lo que concierna a sus intereses. Guardar silencio también es su derecho, bueno, al menos es lo que dicen los abogados que conocen de Derecho Constitucional. Hay que recordar que el 27 de diciembre, luego de que la Fiscalía la echó el guante al segundo presunto implicado, ipso facto, Vera Carrizal solicitó el amparo de la justicia de la Unión, el cual le fue concedido… Y hablando de justicia, luego del sainete del 3 de enero, cuando fue elegido presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), Eduardo Pinacho Sánchez, en sustitución de la magistrada, María Eugenia Villanueva Abraján, tal parece que la calma volvió a dicho órgano jurisdiccional, además de que en un acto institucional y de respeto a la división de poderes, fue recibido por el gobernador Alejandro Murat. Lo que no se habrá de superar en breve es la polarización entre los hombres de toga y birrete… Luego del anuncio de que se solicitaría la renuncia al menos a 300 trabajadores eventuales de los Servicios de Salud en Oaxaca (SSO), a partir del primero de enero, con criterios de racionalidad financiera, la dependencia a cargo de Donato Casas Escamilla, dio marcha atrás y dio instrucciones de que se revisara caso por caso. La medida, que en un principio se advertía firme, entró en un mar de vacilaciones y dudas. Lo que sí hay que valorar es que, por primera vez en la historia reciente, el gobierno estatal entrará con su cuerno a los SSO. Son más de 1 mil 300 millones de pesos de recursos estatales los que se sumarán a lo autorizado en el Presupuesto de Egresos de la Federación para 2020… Quien se ha puesto en la mira de la ciudadanía es la titular del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado (SAPAO), Laura Vignon Carreño, pues el desabasto del vital líquido se ha convertido en una demanda social, habida cuenta de que al menos en la administración anterior, uno de los rubros que fue atendido fue el suministro de agua. En esta administración, con toda la inversión que se ha llevado a cabo, “el agua sencillamente no fluye”. El abasto ha caído en un 50%. Sin embargo, la funcionaria aludida ha ofrecido que el servicio mejorará a fines de enero… Para la ciudadanía y con todo lo que se está viendo en el recientemente creado Instituto para la Salud y el Bienestar (INSABI); el desabasto de medicinas; los cobros a los más pobres, etc., para la ciudadanía fueron una burla las promesas del presidente Andrés Manuel López Obrador, en torno a mejorar los servicios sanitarios. Por ello, pocos le han creído al titular del ISSSTE, Luis Antonio Ramírez Pineda, que en su afán de figurar como uno de los prospectos de MORENA –no del PRI- a la gubernatura del estado, para 2022, ha ofrecido el oro y el moro, en lo que se refiere a infraestructura hospitalaria… Por cierto, esta semana estará de visita en la entidad, en lo que es la primera gira de trabajo de 2020, el presidente López Obrador. El motivo es supervisar los trabajos del Programa de Pavimentación de Caminos Rurales. Para dicho efecto, quien se ha colgado los lauros de la gloria es el oaxaqueño titular del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI), Adelfo Regino Montes que, al igual que otros de sus correligionarios, espera el espaldarazo de AMLO para entrarle en la puja del 2022… Y nos vemos en la siguiente RP
