A sus ocho años de edad, Kevin, no soportó que su abuelo le arrebatara el teléfono celular a condición de que conviviera con la familia, el niño explotó y dijo que no quería platicar con ellos, minutos después se quitó la vida en su habitación. De acuerdo con declaraciones de su familia que quedaron asentadas en la Carpeta de Investigación FAZ/AZ-4/UI-1S/D/03778/09-2019-R1 iniciada por el …