Seis meses antes de las elecciones presidenciales, en enero de 2018, Bank of America emitió un documento donde mostraba dudas sobre el plan de austeridad propuesto por Andrés Manuel López Obrador, en ese entonces precandidato a la Presidencia de la coalición Juntos Haremos Historia, con el que pretendía ahorrar unos 288 mil millones de pesos.
Tan sólo la construcción de las refinerías, apuntaba un analista del banco, podría significar un desembolso de entre 160 mil y 400 mil millones de pesos, dependiendo de su tamaño y capacidad, mientras que para la reubicación de dependencias se necesitaría “una cantidad de dinero demasiado difícil de estimar”.
En tanto, los programas de asistencia social supondría un gasto anual de 164 mil millones de pesos al año. Para lograr estas metas sin incrementar la deuda del País, el precandidato puntero contaba con un plan para eliminar la corrupción y los altos costos de la alta burocracia. El Bank of America detalla que la propuesta de recortes salariales y de beneficios a los altos funcionarios podría enfrentar dificultades.
Posteriormente un año y medio después, el 6 de Junio del presente año, Bank of America alertó de recesión económica en México.
Ya que con la tensión comercial con Estados Unidos provocaría un escenario de recesión económica en México, ante una menor inversión y desconfianza en las políticas que implementa el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Frente a un escenario de menor inversión, así como la incertidumbre en el futuro de la relación comercial con Estados Unidos, la economía mexicana enfrentará menor crecimiento, con lo que probablemente estará en recesión, dijo Bank of America Merrill Lynch Global Research.
La firma explicó que el crecimiento del PIB en México es incluso más bajo de sus estimados previos, tanto por la mayor incertidumbre que afecta el crecimiento en Estados Unidos como en México, así como la aplicación de aranceles, peligro desactivado ayer. El grupo redujo su expectativa de crecimiento del PIB para México a 0.7% desde 1% para 2019 y a 1.2% desde 1.5% para 2020.
El día de ayer, el banco estadounidense, aseguró en un análisis que la economía mexicana ya se encuentra en una recesión técnica, toda vez que prevé otra caída en el segundo trimestre del año luego de haberse contraído la actividad en el primer trimestre.
“El indicador del PIB mensual de abril mostró que la debilidad continúa en el segundo trimestre, ya que los servicios se contrajeron mensualmente. Un segundo trimestre consecutivo con una contracción pondrá a México en una recesión técnica. Sí, pronosticamos que el segundo trimestre se contraerá”, señala el análisis enviado a inversionistas firmado por el economista en jefe Carlos Capistrán.
BofA, advierte que si se confirma que el PIB del segundo trimestre se contrajo, podría depreciar el peso y hacer que el mercado anticipe más recortes de tasas por parte del Banco de México, además de que las agencias de calificación crediticia podrían aprovechar la oportunidad para recortar la nota soberana de México.
Agregó que si México se encuentra en una recesión técnica, entonces presionará al presidente Andrés Manuel López Obrador que reaccione aumentando el gasto del gobierno, pero los bajos ingresos pueden impedirle hacerlo o arriesgar la reacción de las agencias de calificación.
Hoy en su conferencia matutina, López Obrador reviró a la correduría Bank of America Merrill Lynch (BofA-ML) quien había señalado que el país se encontraba en recesión técnica y dijo que no es verdad.
“Existe como un club de defensores de esa política económica neoliberal, no aceptan que fue un fracaso, no se resignan que no vamos a seguir con esa política económica”, expresó.