Luego de que el presidente Andrés Manuel López Obrador criticó que Felipe Calderón declaró la guerra al crimen organizado y el día que lo hizo se puso una casaca militar que le quedó grande y parecía al «comandante Borolas», el expresidente afirmó que a él no le queda el saco pero hay otros a los que el cargo les queda grande.
El expanista, sin mencionar al presidente López Obrador, publicó a través de Twitter que en la actual administración se cometen más de 100 homicidios al día, casi el doble que al final de su gobierno.
Sostuvo que su gobierno comenzó a limpiar la casa plagada de animales venenosos.
«Hoy se les deja crecer porque no distinguen alacranes de abejas. A mí no me queda el saco, a otros el cargo les queda grande», indicó.