Agencias.-A pesar de los cuestionamientos de la minoría por su falta de experiencia en la carrera diplomática, Miguel Basáñez Ebergenyi fue ratificado por el Senado de la República como embajador de México en Estados Unidos.
Tuvo los votos en contra de los panistas Javier Lozano y Daniel Ávila, así como el reproche y el sufragio en contra de Layda Sansores, legisladora de la fracción del PT. Sin embargo, el nuevo embajador fue apoyado por 98 senadores, lo que le valió para ocupar el cargo que dejó vacante Eduardo Medina Mora.
Basáñez rindió protesta mismo en la Cámara Alta. La titular de la comisión de Relaciones Exteriores, Gabriela Cuevas, le exigió una relación más cercana con el Poder Legislativo ahora que México se encuentra en el centro del debate de Estados Unidos y “es claro que ni pueden excluirnos ni pueden tampoco marginarnos”.
Los temas que no deben quedar al margen de la embajada, agregó, son los de migración, sobre todo los niños migrantes; la discriminación hacia los mexicanos y la violación a los derechos humanos de los connacionales.
Pero así como unos pidieron darle el voto de confianza al catedrático, hubo voces de reproche. Mientras la priísta, Leticia Herrera, aseguró que Basáñez Ebergenyi representa la combinación “afortunada” de un político experimentado y un intelectual maduro que conoce de cerca las realidades de ambas naciones, el panista Daniel Ávila criticó que el presidente Enrique Peña Nieto haya recomendado a un catedrático y no a un diplomático para la embajada más importante del país.
“(Mientras tanto) en consonancia con la trascendencia de esa relación, quien ha sido nominada por el presidente Barack Obama como nueva embajadora de Estados Unidos en México, Roberta Jacobson, tiene más de un cuarto de siglo de experiencia en asuntos del hemisferio occidental en la diplomacia estadounidense. Ha participado en negociaciones, lo mismo en el establecimiento de relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y Cuba que la configuración de la Iniciativa Mérida”, externó Ávila Ruiz.
En su oportunidad, Layda Sansores, simpatizante del ex candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador, consideró que la embajada de México en Estados Unidos es la más importante y “debería estar reservada al miembro más destacado del cuerpo diplomático”, pero este gobierno no se preocupa por que los cargos públicos los ocupen las personas más experimentadas, sino “los cuates más leales e incondicionales”.