Esta mañana, el presidente Andrés Manuel López Obrador habló acerca de la corrupción en su círculo cercano, advirtiendo que si algún funcionario o incluso un familiar comete dicho delito, irá a prisión.
“Puede ser mi hermano o un hijo mío, pero si comete un delito de corrupción, se va a la cárcel, y estoy hablando de mi familia”, dice al referir que trabaja en el combate a la corrupción.
Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, el jefe del Ejecutivo subrayó que si algún funcionario comete el delito de corrupción, no sólo será separado de su cargo, también se le consignará.