Este viernes, el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, señaló que José Antonio “Y”, alias el “Marro”, fue ingresado al CEFERESO número 1 Altiplano, procedente del penal Puentecillas, Guanajuato.
En la cárcel de máxima seguridad, el líder del Cártel de Santa Rosa de Lima será puesto a disposición del juez federal que lo requiere por delincuencia organizada y robo de combustible.
El “Marro” fue detenido el pasado 2 de agosto, en el municipio Juventino Rosas, Guanajuato, tras un operativo coordinado de fuerzas federales y estatales. Además de la captura, se rescató a una empresaria originaria de Apaseo el Grande, que se encontraba secuestrada, informó el gobierno estatal.
El Altiplano, ubicado a 90 kilómetros de la Ciudad de México, en el municipio de Almoloya de Juárez, Estado de México, alberga a los capos del narcotráfico de más renombre en el país. Uno de ellos fue el prisionero número 3578: Joaquín el “Chapo” Guzmán, fundador del Cártel de Sinaloa.
La cárcel, la primera de máxima seguridad en el país, está en operación desde 1991. Fue construida para evitar la fuga de prisioneros de alto perfil.
El centro ocupa una extensión aproximada de 260,000 metros cuadrados, de los cuales casi 28,000 componen las instalaciones de la prisión. Sus paredes tienen un metro de grosor y cuenta con capacidad para 724 reos.
En fechas recientes, el ingreso más notable al penal del Altiplano es el de Héctor Mario y Luis Manuel Hernández, líderes del grupo criminal La Línea, presuntamente vinculados con el ataque a la familia LeBarón, el pasado mes de noviembre.
El pasado domingo 2 de agosto, apenas pasadas las 03:00 horas los culebrones se interrumpieron con una alerta de tres palabras que todos entendieron: “Cayó El Marro”.Fue detenido por las Fuerzas Armadas en una finca de la carretera Juventino-Rosas, donde desde hace días lo tenían cercado.
En el operativo no se disparó ni un sólo tiro, a pesar de que los detenidos contaban con armas. Tres personas le sirvieron de escudo al líder del Cártel de Santa Rosa de Lima mientras intentaba darse a la fuga.
Durante el operativo, cuentan algunas expertos de seguridad como Héctor de Mauleón, el criminal más buscado del país corrió al lado de su jefe de seguridad, Raúl Alberto “N”, alias “El Diente”, hacia un terreno baldío ubicado al fondo de la finca. Al llegar a la barda que separa a ambos predios, “El Diente” dejó que “El Marro” brincara hacia otro lado. Según agentes que participaron en el operativo, su idea era sacrificarse para que el cabecilla huachicolero lograra escapar.
Sin embargo, Yépez no llego muy lejos. Fue interceptado a unos metros de la barda.
La Sedena había trazado un amplio perímetro alrededor dela finca —localizada en la carretera Juventino Rosas y vecina de una Telesecundaria—. Durante más de seis horas, ningún vehículo pudo transitar por la región.
Al menos 20 agentes ingresaron a la guarida, donde primero forzaron la reja principal —protegida sólo con una cadena— y más adelante, un portón verde. Ahí recibieron el primer y único disparo de Saulo Sergio “N”, escolta de “El Marro”. El líder criminal iba vestido con una sudadera gris, un pantalón de mezclilla, y botas tácticas de color caqui.