El comisionado de Seguridad Pública, Vialidad y Protección Civil Municipal, José Luis Echeverría Morales rechazó que se haya agredido a mujeres embarazadas
José HANNAN ROBLES
Durante el desalojo de los comerciantes que ocupaban la Plaza de la Constitución, Zócalo y la Alameda de León desde hace ocho meses, hubo pleno respeto de las garantías individuales por parte de quienes realizaron el operativo conjunto, aseguró el comisionado de Seguridad Pública, Vialidad y Protección Civil Municipal, José Luis Echeverría Morales.
Indicó que durante el operativo de recuperación de las dos planchas estuvieron presentes observadores de la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca.
Afirmó que durante la intervención policial que duró unos 40 minutos no se registraron actos de violencia, confrontación, así como tampoco se hizo el aseguramiento de mercancía.
Echeverría Morales refutó que se hubiera agredido a mujeres embarazadas o a menores de edad. El operativo transcurrió y concluyó con saldo blanco, contando con la colaboración voluntaria de un pequeño grupo de comerciantes que permanecían en el lugar.
Explicó que el retiro de los aproximadamente 400 puestos ambulantes que ocupaban el Zócalo y la Alameda de León, se realizó con el apoyo de personal de la coordinación de Inspección y Vigilancia, así como elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, de la Agencia Estatal de Investigaciones y del Cuerpo de Bomberos.
Reiteró que se tuvo la participación de la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca, que en todo momento se mantuvo vigilante de que los elementos policiales y el personal del Ayuntamiento respetaran las garantías individuales de los vendedores ambulantes.
Los comerciantes que se dedicaban a la venta de diversos productos en un espacio público no pagaban ningún impuesto al Ayuntamiento.
Una vez desocupado y lavado el Zócalo y la Alameda de León, familias enteras de propios y visitantes disfrutaron del domingo en que se celebró el Día de las Madres.
Los restaurantes que funcionan en los portales recobraron su movimiento con decenas de parroquianos que volvieron a ocupar las mesitas para degustar alimentos y bebidas.
“Sin duda extrañábamos ver el Zócalo libre de comerciantes, limpio y poder caminar sin problema”, señaló el señor José Juan Chávez, quien diariamente transita por el centro de la ciudad.
Rosa Álvarez, madre de familia y prestadora de servicios turísticos, agradeció a las autoridades locales por haber escuchado a la ciudadanía y quitar los puestos que no sólo afectaban el patrimonio, sino que resultaban hasta peligrosos por lo improvisado de sus estructuras.
“Estoy contenta, ahora se ve el orden y limpieza, y podremos recuperar el turismo que anteriormente dejo de venir por esos meses que estuvo el Zócalo ocupado por comerciantes ambulantes”, puntualizó.
Jesús Martínez, trabajador de uno de los comercios establecidos en el zócalo capitalino, consideró que es una medida acertada la limpieza de esta zona de la ciudad, pues existían graves afectaciones a la economía, ya que el turismo no se acercaba y ponía en riesgo el empleo de cientos de personas.
