Agencias
Para los familiares de las víctimas, sentados en primera fila, es imposible contener el llanto. Los niños extrañan a sus padres, la tropa a sus compañeros y las mujeres a sus esposos. Es momento del último adiós.
Los agentes fueron brutalmente asesinados en la región Mixteca, los amarraron y quemaron vivos. Los altos mandos prometen justicia, pero eso a los deudos no les basta.
“A los responsables los vamos a buscar y los vamos a encontrar, así se escondan debajo de las piedras, de ahí los vamos a sacar”, dice José Antonio Yglesias Arreola, coordinador de la AEI.
Una pequeña de 10 años abrazaba a su madre. Cuando escuchan el nombre de Delfino Labias, rompen en llanto, junto a ellas, una joven seca las lágrimas de su mejilla. El agente caído era investigador desde 1999.
“Estos hechos tan lamentables deben unirnos y hacer que redoblemos esfuerzos en nuestra ardua tarea a fin de que las vidas que se han perdido no sean en vano”, resaltó Yglesias Arreola en su discurso.
La hermana de Juan García aún carga su maleta, el viaje había sido largo, pero al fin llegó, para despedirlo. Junto a ella, un pequeño y su padre observan fijamente el ataúd. Fueron casi 25 años de servicio del agente caído.
“Estos elementos demostraron en todo momento el gusto por la investigación, el amor a su trabajo”, decía el coordinador de la AEI.
Era momento de colocar las fotografías de los elementos en la pared de los héroes, de los investigadores caídos, que son más de los que se desean.
“Orgullo tiene que tener la Agencia Estatal de Investigaciones y cada uno de sus elementos, porque como se demuestran con estos hechos, todos estamos llamados a actuar con la misma responsabilidad, con la misma entrega y la misma pasión en nuestro trabajo”, dijo Rubén Vasconcelos Méndez, fiscal general del estado en su oportunidad.
Los agentes disparan las balas de salva, así despiden a sus compañeros, los que se han adelantado. Saben a lo que se enfrentan, saben que pudieron ser ellos, saben que quizá mañana vayan a una diligencia y ya no regresen con vida.