Don Jorge Fernando Iturribarría Martínez no solamente fue
un acucioso historiador especialmente de los asuntos de Oaxaca,
sino que durante mucho tiempo escribió artículos para periódicos
y revistas. Su basta a interesante obra ha servido como
referencia para otros historiadores que en ellas tienen una veta
valiosa de datos. Don Jorge Fernando amó entrañablemente a
Oaxaca, fue un personaje culto y respetado en nuestra entidad.
El notable historiador escribió en relación a todos los períodos
de la historia de Oaxaca en artículos periodísticos pero
investigó con mayor profundidad los acervos de libros y publicaciones
diversas que se guardaban en la Biblioteca General
del Estado, de la cual fue director durante varias décadas cuando
la biblioteca se encontraba en el edificio ubicado en la esquina
de avenida Independencia y 5 de Mayo, la cual fue donada
con todo inmueble a la Universidad “Benito Juárez” de Oaxaca
en la década de los cincuentas del siglo pasado, ignorándose
dónde quedó el valiosísimo acervo.
El Instituto clausurado por el carrancismo
Don Jorge Fernando nació en esta ciudad el 5 de abril de
1902; sus padres el Licenciado Fernando Iturribarría Fernández
y su esposa doña Adela Martínez Arrazola. Sus primeras letras
las aprendió en el colegio que dirigía el padre Carlos Gracida y
sus estudios profesionales en la Escuela de Leyes del Instituto
de Ciencias y Artes del Estado, donde su señor padre impartía
cátedra. Esta institución fue clausurada por los carrancistas
en 1916 y persiguieron al Licenciado Fernando Iturribarría Fernández
porque fue funcionario judicial durante el tiempo en
que el Estado de Oaxaca se declaró libre y soberano en 1915.
Durante ese periodo la situación de Oaxaca fue de muchas
penalidades pues se presentó una hambruna terrible por el
abandono del campo y la nula producción de alimentos, lo
cual se complicó con enfermedades tan desastrosas como
el tifo y el cólera que diezmaron a la población pues eran
sumamente contagiosas, a tal grado que hasta los panteoneros
resultaron insuficientes y muchos enfermos fueron llevados
al panteón general antes de que fallecieran. Se dio el
caso de algunos que, estando amontonados con los demás
cadáveres, reaccionaron y despertaron de su letargo emprendiendo
el retorno a sus casas.
Un personaje respetado por la sociedad
oaxaqueña, que durante varias décadas
fue director de la Biblioteca General
del Estado; como periodista colaboró
en innumerables periódicos y revistas
de la ciudad de Oaxaca y del país,
como escritor es dueño de un amplio
acervo de la historia, autor de obras
consideradas joyas bibliográficas
Escritor y periodista en Oaxaca
Estas circunstancias obligaron a Jorge Fernando Iturribarría
Martínez a abandonar sus estudios en el Instituto y buscar la forma
de sobrevivir cuando estaba por cumplir veinte años: con la
ayuda de amigos y familiares editó el primer periódico comercial
de la ciudad de Oaxaca que se llamó “Blanco y Negro”, que además
del aspecto noticioso publicaba anuncios del exiguo comercio
local y de profesionistas que ofrecían sus servicios.
Cuando el general Manuel García Vigil llegó a la gubernatura
de Oaxaca, el 15 de diciembre de 1920, don Jorge Fernando
escribía en el periódico “La Patria” dirigido por el Lic. Eduardo
Vasconcelos. A finales de 1923 dejó de circular este periódico y
entonces Iturribarría Martínez pasó a escribir al diario “Ecos”
donde mostró su inclinación por los hechos históricos publicando
interesantes efemérides. A partir de entonces y durante poco
mas de 40 años escribió sucesivamente en los periódicos “Mercurio”,
“El Oaxaqueño”, La Voz de Oaxaca, El Universal, del que
era corresponsal, Oaxaca Gráfico y Carteles del Sur, así como en
las revistas Alma Latina, Pedagógica, Sur y Oaxaca en México.
Sus libros de historia de Oaxaca
En cuanto a sus publicaciones de tipo histórico en 1933 salió a
la luz el folleto “Solemnes Funerales del general Vicente Guerrero
en la Ciudad de Oaxaca”, el cual fue patrocinado por el Ayuntamiento
de Oaxaca de Juárez con motivo de la exhumación de
los restos del héroe. En 1935 terminó el primer tomo “Historia
de Oaxaca”, una joya bibliográfica para los oaxaqueños. El cuarto
y último tomo lo terminó en 1956 patrocinado por el Gobierno
del Estado. También publicó libros de texto con temas de la geografía
de Oaxaca para las escuelas primarias de la entidad, compendio
de historia de Oaxaca también para escuelas primarias,
manual de historia de México y resumen de Oaxaca en la historia.
En 1958 el Banco Nacional Cinematográfico convocó a un
concurso a fin de obtener el guion para la celebración del centenario
de las Leyes de Reforma, con una película. Ganó el trabajo
enviado por el escritor oaxaqueño que simplemente denominó
“Benito Juárez-Porfirio Díaz” y aun cuando la obra no se llevó
a la pantalla, sí se publicó en la serie “Populibros de la Prensa”,
que tuvo resonancia nacional.
Amplio acervo de historia
Otras de sus obras fueron: Oaxaca en la Historia, un texto
sobre literatura universal, Estética e Historia del Arte, Porfirio
Díaz Ante la Historia. Para conmemorar los 450 años de que la
Villa de Antequera fue elevada al rango de ciudad, don Jorge Fernando
preparaba lo que sería su último libro “Sucedió en Oaxaca”
y su discurso de ingreso a la Academia Mexicana de Historia.
Lamentablemente falleció el 15 de octubre de 1981. En 1992
el gobierno del Estado le otorgó postmortem la medalla “Flechador
del Sol” que recibió su viuda doña Alicia Bolaños Cacho.
Otras obras del escritor son: Monografía Histórica del Palacio
de Gobierno 1576-1940, Geografía Elemental del Estado de
Oaxaca, Morelos en Oaxaca, El Agua de la Ciudad de Oaxaca
desde los tiempos más remotos hasta el primer tercio del siglo
XX, Breve Historia de Oaxaca y Manual de Historia de México,
Reseña de los diferentes edificios ocupados por la Escuela Normal
del Estado, Ensayo Histórico sobre la industria de la seda
en Oaxaca, Datos Biográficos del Presbítero Manuel Sabino
Crespo, héroe de la independencia nacional y Primer Benemérito
de Oaxaca, Las Viejas Culturas de Oaxaca, Oaxaca en
la historia de la Época Precolombina a los tiempos actuales,
La Restauración de la República y las revueltas de La Noria y
Tuxtepec, La Generación Oaxaqueña del 57, José María Díaz
Ordaz. Breves Apuntes y otros más. En cuanto a sus artículos
fueron numerosos en periódicos y revistas de Oaxaca y del país.
Iturribarría Martínez y la democracia
En su libro “Porfirio Díaz ante la Historia” el escritor se
refirió en una parte a las elecciones en nuestro país, indicando
que: en el siglo 20, el nuestro “…estamos viviendo la etapa
de un neoporfirismo, si no idéntico al viejo régimen, sí parecido
porque sigue siendo válido el apotegma de que primero
es ser y luego la manera de ser”.
Y agrega: “Es obvio que mientras México no alcance ese
ideal -libertad con pan, meta de los pueblos que sinceramente
aspiran a conservar y perfeccionar la democracia como régimen
de gobierno-, tenderá a subordinar la libertad al progreso
económico; a corregir nuestras grandes carencias en servicios
sociales, en escuelas, en producción de alimentos, en irrigación,
en caminos, en la prosperidad industrial que nos acerque
a la autosuficiencia económica.
“Por eso el régimen de la revolución ha organizado su
maquinaria electoral en forma tal que la renovación periódica
de poderes y muy principalmente la sucesión presidencial,
tengan toda la apariencia de una función cívica respaldada
espontáneamente por la mayoría ciudadana. En esta forma la
restricción de la libertad política ha impedido que la lucha electoral
degenere en violencia armada y comprometa la paz de la
nación, permitiendo un clima de tranquilidad pública propicio
al progreso económico que nos resta por conquistar aún”.
El escritor fue primero en sugerir al gobierno del Estado
que fuera pintado un mural en el cubo de la escalinata principal
de Palacio de Gobierno, pero los funcionarios ignorantes
de entonces muy parecidos a los de hoy, desestimaron la
sugerencia cuando Rufino Tamayo aun estada dispuesto a
pintar el mural.
FUENTE: “Indelebles”, publicación periódica de la Casa de la
Cultura de Oaxaca.
