Heredero de la leyenda de la máscara de plata, el Hijo del Santo habla en exclusiva para Real Politik de cómo ve el México actual, de lo que se tiene que hacer desde la familia para sacar a este país adelante, de sus sueños. Lamenta que la corrupción sea uno de los peores males que nos agobian y confiesa que anhela ver una nación donde no haya secuestros ni impunidad, ni se abuse de las personas débiles, un México donde haya caras felices, donde la gente tenga recursos y trabajo, donde los niños puedan ir a la escuela. Dice que la Federación debe poner un hasta aquí a las acciones que manchan la imagen de Oaxaca
José HANNAN ROBLES
Su padre moldeó su leyenda luchando contra zombis, momias y mujeres vampiro. Venció a centenares de rivales peleando cuerpo a cuerpo en las arenas de los gladiadores mexicanos.
Los tiempos modernos, sin embargo, han traído nuevos retos y enemigos al linaje de la máscara más popular de la lucha libre mexicana. Hoy el Hijo del Santo externa su deseo de ver un México libre de secuestros, de impunidad, de corrupción y de abusos contra las personas débiles.
El heredero de la leyenda de la máscara de plata dice con un dejo de tristeza que nuestros gobernantes no todos son gente honesta y considera que hay muchos problemas, pero uno de los peores males que agobia al país es la corrupción.
Detrás de esa tapa plateada, la mirada se queda fija y se pierde en el horizonte cuando el Hijo del Santo confiesa sus sueños y habla que su mayor anhelo sería ver un México con caras felices, donde la gente tuviera recursos, tuviera trabajo, que los niños pudieran ir a la escuela y dejar esas absurdas marchas de cerrar escuelas.
Lamenta que Oaxaca se vea afectada por marchas y otras acciones que ahuyentan al turismo y afecta a los habitantes no solo de la ciudad sino del estado. Considera que el Gobierno federal debe poner un hasta aquí para que ninguna acción manche la imagen del estado.
Durante una entrevista exclusiva con Real Politik habla de diversos temas, del México con el que sueña, de la pérdida de valores, de lo que tenemos que hacer los mexicanos desde el núcleo familiar porque todo está prostituido hasta la lucha libre, de su retiro. Habla también de política, aunque no es lo suyo.
El Enmascarado de Plata estuvo recientemente en Oaxaca, donde el pasado 18 de octubre festejó 34 años de su debut como luchador profesional, en una función en la que por primera vez hizo pareja con Santo Jr.
En ese marco, el legendario luchador firmó autógrafos y se tomó fotografías con cientos de admiradores en las instalaciones de El Imparcial como parte de los festejos del 65 aniversario de El mejor diario de Oaxaca.
De espíritu ambientalista
El Hijo del Santo, Jorge Guzmán, nació el 2 de agosto de 1963. Su padre Rodolfo Guzmán Huerta, quien cumpliría 99 años de edad apenas el pasado 23 de septiembre, es la más grande leyenda de la lucha libre mexicana.
Debutó el 18 de octubre de 1982, hace 34 años, con el nombre que heredó de su padre.
En una faceta poco conocida, el Hijo del Santo ha apoyado a la fundación Wild Coast dedicada a la conservación y protección de las especies marinas en peligro de extinción.
Asimismo ha sido solidario con el programa Áreas Marinas Protegidas en Baja California, México y California, Estados Unidos, ha impulsado la pesca sustentable, en 2007 recibió el premio al Héroe al Medio Ambiente por su amor altruista y decidido apoyo a esta causa.
Participó en la cuarta campaña de la Fundación CIM AB, con el eslogan Se Vale Apoyar en apoyo de las mujeres con cáncer de mama, también con el apoyo de la UNICEF ha promovido el respeto a los derechos de los niños y es parte de la campaña Vive México, proyecto lanzado para la reactivación del turismo en el país.
Se considera una persona comprometida con la preservación del medio ambiente, donde ha dado su mayor batalla.
Al Hijo del Santo ya no le tocó luchar contra zombis, momias y mujeres vampiro, vive la realidad de un país inseguro, de una ciudad como la de México donde la delincuencia ha sentado sus reales.
Se considera como parte de una familia de superhéroes que a veces se ha tenido que enfrentar contra el crimen, aunque no salga victorioso.
Recuerda que una vez un tipo le puso una pistola en la sien y le exigió que le entregara el reloj que traía puesto y que le había costado mucho trabajo comprar.
Se lo dio, por eso desde entonces es un superhéroe que no usa reloj y dice que si en ese momento hubiera traído puesta la máscara aquello no hubiera ocurrido.
Y es ese personaje, el ser humano, quien confiesa a Real Politik sus anhelos, sus sueños, sus deseos.
Un país diferente
P.- ¿Cómo percibe al México actual?
R.- Don Pepe por qué me mete en problemas políticos, mire don Pepe como ciudadano lamento mucho la situación de México. Creo que tenemos recursos, todo para ser un gran país, lamentablemente hay mucha libertad, no de expresión, a veces se mal informa al público, nuestros gobernantes no todos son gente honesta, creo que lo más triste que existe es la corrupción, son muchas cosas.
Como ciudadano lo lamento, me gustaría que este país fuera diferente, pero lo único que podemos hacer es poner un granito de arena, en lugar de estar hablando y de estar haciendo memes vamos a empezar por nuestro hogar, por darle valores morales a nuestros hijos, creo se han perdido los valores morales en los jóvenes, los principios, el respeto, el amor a los adultos mayores, son muchas cosas que a mí me entristecen. Incluso la propia lucha libre, la lucha libre, y lo digo sin tapujos, se ha prostituido mucho y eso es muy lamentable.
Entonces, las nuevas generaciones como Santo Junior tienen que encargarse de que la lucha libre vuelva a ser un deporte familiar, un deporte que deje muy en alto el nombre de México, entonces tenemos cada quien que hacer las cosas desde nuestra trinchera, hacer las cosas bien y dar lo mejor.
P.- ¿Cómo sueña al México del futuro?
R.- Me gustaría, a ver si con esto le contesto, me gustaría ser ese Santo de las películas que no permite que haya secuestros, que no permite que haya impunidad, que no permite que nadie abuse de los débiles, me gustaría ser ese Santo.
Quisiera ver un México con caras muy felices, que la gente tuviera recursos, tuviera trabajo, que los niños pudieran ir a la escuela y dejar esas absurdas marchas de cerrar escuelas, en fin.
Si yo fuera el Santo de las películas haría mucho por México.
P.- ¿Cuál es su percepción de Oaxaca?
R.- Es un estado hermoso, muy rico en turismo, en todo lo que es naturaleza, Puerto Escondido, Huatulco, la única manchita la conocemos todos, es muy lamentable que existan marchas y cosas que dañen al turismo, creo que el Gobierno federal debería de poner un hasta aquí, pero ya no me meto en cuestiones políticas, pero no debemos permitir que Oaxaca tenga una mancha, no.
Es un estado hermosísimo, a mí me encanta desde que lo conozco tengo muy buenos amigos aquí, entonces lo disfruto mucho cuando estoy aquí.
P.- ¿Por qué práctica el altruismo?
R.- Porque he sido un ser humano muy afortunado desde niño, tengo mucho que agradecerle a Dios y a la vida, creo que la manera de hacerlo es apoyando con mi personaje las diferentes campañas a las que me invitan, a veces no acepto todas porque entonces sería ajonjolí de todos los moles, como se dice vulgarmente.
En su momento apoyé a UNICEF, para apoyar a los niños mexicanos para que tuvieran estudios, hice campañas con UNICEF.
Ahorita estamos en octubre que es el mes rosa, el mes para apoyar a las mujeres con cáncer de mama, hice mi campaña de Se Vale Tocar. Actualmente sigo con una organización que se llama Costa Salvaje en pro de las especies marinas en peligro de extinción, en pro de los arrecifes, de conservar la naturaleza.
También estuve con Yolanda Andrade en una campaña contra el bullying, lo hago porque es una manera de devolverle a la vida un poquito de lo que yo he tenido, ha sido con estas organizaciones con las que me he involucrado más.
P.- ¿Qué es lo que más le gusta de Oaxaca?
R.- Lo que más me gusta de Oaxaca, hay muchas cosas, la comida, su gastronomía, yo me acuerdo cuando venía aquí a mis primeras luchas me trajo don Melitón Luna, él decía que era botana, yo pensé que era una botanita y eran unas comilonas riquísimas. Me gusta todo, a mí me encantaba ir al mercado a conocer.
P.- ¿Qué representa para usted ostentar el nombre del Santo, uno de los más grandes luchadores que ha tenido México?
R.- En primer lugar es una gran satisfacción el hecho de que mi padre me haya elegido a mí para que yo fuera el sucesor de su personaje y también es una gran responsabilidad llevar esta máscara, no es fácil.
El Santo cuando yo empecé, el Santo ya era un monstruo de la lucha libre y del cine, era un ídolo de México, después de su muerte la idolatría se multiplicó, es increíble cómo se multiplicó, ahí el Hijo del Santo pudo haber fracaso porque era tal la fuerza de mi papá que yo pude haberme perdido en el camino, sin embargo, afortunadamente supe salir adelante, supe hacer una carrera limpia, bien administrada, y hasta ahora mira el Hijo del Santo tiene su propia historia. Deseo que Santo Junior haga su propia historia, que no lo comparen con el Santo ni con el Hijo del Santo, así como el Hijo del Santo tiene su historia propia, que el Santo Junior empiece a labrar su propia historia.
P.- ¿Ya superó la lesión que sufrió en 2013?
R.- Esta lesión fue casi a finales de 2013, todo lo que restó de ese año, 2014 y 2015 fue muy difícil para mí porque estás acostumbrado a un ritmo de vida y de pronto te ponen el freno de mano y te dicen ya no puedes hacer lo que más te gusta hacer, entonces vienen muchos sentimientos de tristeza y de enojo, pero lo vi del lado positivo entonces le di gracias a Dios que los doctores a tiempo me detectaron, es una lesión, una cosita en la médula espinal pero es peligroso entonces por eso tuve que hacer un alto y, pues mira, el debut de Santo Junior fue como un aliciente, algo que me animó a regresar al ring, me puse a entrenar y ahora que él empieza, yo respeto mucho al público yo estoy físicamente bien, me siento bien, soy ágil todavía pero creo que el público merece un respeto y ya creo que es el momento de ir pensando en decir adiós, no ahorita pero sí a lo mejor el próximo año y dejarle la responsabilidad a mi hijo.
“Me gustaría ser ese Santo de las películas que no permite que haya secuestros, que no permite que haya impunidad, que no permite que nadie abuse de los débiles, me gustaría ser ese Santo”
“Lo único que podemos hacer es poner un granito de arena, en lugar de estar hablando y de estar haciendo memes vamos a empezar por nuestro hogar, por darle valores morales a nuestros hijos, creo se han perdido los valores morales en los jóvenes, los principios, el respeto, el amor a los adultos mayores”
“Es muy lamentable que existan marchas y cosas que dañen al turismo, creo que el Gobierno federal debería de poner un hasta aquí, pero ya no me meto en cuestiones políticas, pero no debemos permitir que Oaxaca tenga una mancha, no”
El Hijo del Santo, luchador profesional
