Agencias.-El Banco de México (Banxico) recortó este jueves su pronóstico de crecimiento de la economía del país para este año, a un rango de entre 2% y 3%, de acuerdo con su Informe Trimestral octubre-diciembre 2015.
El ajuste es medio punto porcentual abajo del previsto anteriormente.
“La economía mundial ha sido lo que ha inducido esta revisión y más que nada la revisión a la baja en el pronóstico de producción industrial para Estados Unidos”, dijo el Gobernador de Banxico, Agustín Carstens en la presentación del informe.
La Secretaría de Hacienda, a cargo de Luis Videgaray, prevé una expansión del Producto Interno Bruto (PIB) de entre 2.6% y 3.6%.
Para 2017 el Banco Central también bajó su estimado de crecimiento a un rango de 2.5% y 3.5% desde un 3% a 4% previo.
«Para 2016 y 2017 se prevé un entorno externo más complejo que el previsto en el informe anterior. En particular se estima un menor dinamismo de la demanda externa respecto a lo previamente anticipado, principalmente ante la revisión a la baja en los pronósticos para la actividad industrial en Estados Unidos y la desaceleración en la actividad económica mundial», explicó.
El Banco Central espera que la economía mexicana genere entre 610,000 y 710,000 nuevas plazas laborales en el año, un ajuste de 20,000 puestos de trabajo menos respecto al informe previo.
Respecto a la inflación, Banxico espera es ésta alcance temporalmente niveles superiores a 3% entre el segundo y el tercer trimestre para luego cerrar el año cerca de dicho nivel.
Esta trayectoría de la inflación se deberá a los ajustes en precios debido a la depreciación del tipo de cambio y a la modificación en la forma de fijar los precios de la gasolina, lo que provocaría precios más bajos de este cobustible en el primer y cuarto trimestre, pero más altos para el segundo y tercero de este 2016, de acuerdo con el resumen del informe trimestral.
Agustín Carstens, gobernador del Banco de México, indicó en conferencia de prensa que en la temporada de verano se registra una mayor demanda de gasolina y por lo tanto un incremento en los precios del combustible en le mercado internacional, lo que podría reflejarse en los precios nacionales.
Carstens también descartó por el momento medidas adicionales en política monetaria, aunque señaló que el Banco Central estará al tanto del comportamiento de los indicadores económicos.
“Estaremos muy pendientes por si hay cambios en las condicIones en algunos renglones que justifiquen acciones subsecuentes. Se menciona el comprotamiento del tipo de cambio y cómo afectaría la formación de precios», señaló el gobernador de Banxico.
Entre los riesgos para economía del país sobresalen una actividad industrial menos a la esperada, que los precios del petróleo no se recuperen y que la volatilidad de acentúe aún más.
También señaló que ve espacio para que continúe una apreciación del peso ante el dólar, y aseguró que un nuevo mecanismo de intervención discrecional en el mercado cambiario será usado de forma muy excepcional, en casos de baja liquidez.
