Agencias.-La percepción de seguridad que hay entre la población cada vez es más baja. A pesar de los operativos aplicados por el gobierno, la ciudadanía cada vez encuentra menos seguridad en la calle, el transporte público o su vivienda.
Desde 2012 a la fecha la ciudadanía cada vez se siente menos segura en su vivienda, pues mientras al inicio del sexenio solo 16.8 por ciento se sentía inseguro en su casa, para las últimas mediciones en 2014 la cifra de inseguridad pasó a 23.9.
De acuerdo con los indicadores del Programa Nacional para la Prevención de la Violencia y la Delincuencia, los esfuerzos que se aplican en materia de seguridad no necesariamente se reflejan en la percepción de la población.
Según los indicadores publicados por la Secretaría de Gobernación, 67.70 por ciento de la población en México se siente insegura en la calle, mientras que en 2012 la cifra era de 65.92 por ciento.
El gobierno federal tiene como meta a cumplir en el sexenio, que 35 por ciento de las personas perciban la calle como una zona segura.
Los indicadores publicados por la Segob, 67.70 por ciento de la población en México se siente insegura en la calle
Es decir que 65 por ciento de la gente que transita aún percibe peligro de asalto o robo mientras se encuentran en la calle.
Otro de los rubros en los que el gobierno tiene un rezago importante para el cumplimiento de sus metas es en la capacitación de sus funcionarios para erradicar algunos delitos.
Aunque la meta de servidores públicos capacitados para proporcionar auxilio en la trata de personas es baja, de apenas seis por ciento, ésta solo se ha cumplido en 1.76 por ciento.
En los estados esta capacitación apenas llega a dos del total de estados de la República, pese a que todos deberían de contar con sensibilización de sus funcionarios para lograr un mejor trato a las víctimas de trata y evitar que sean vulnerados en sus derechos.
La capacitación de los funcionarios federales en materia de derechos humanos y respeto de garantías también es deficiente. A la mitad del sexenio se han cumplido menos de la mitad de las metas planteadas para el sexenio.
Además, la consignación de quienes han cometido un delito de trata es baja. A pesar de las consignaciones que hace el gobierno federal solo se logra que dos de cada 10 detenidos tengan un proceso.
También los avances que se logran en materia de implementación de sistemas informáticos y rendición de cuentas, van estancados en su modernización y aplicación.